Para intentar contener la inflación y a contrareloj, el Gobierno nacional busca acordar con cámaras y empresas porductoras de alimentos una nueva canasta compuesta por 120 productos alimenticios, bebidas y artículos de higiene personal que mantendrán sus precios congelados hasta diciembre.
Con esta medida, el gobierno busca atenuar la inflación, que en los primeros cuatro meses del año ya llegó al 17,6%, según el INDEC, más de la mitad del 29% proyectada en la ley de Presupuesto, aunque en su exposición ante el Congreso, el jefe de Gabinete, Santiago Cafiero, reconoció que podría llegar al 33% anual, una cifra que los analistas de mercado consultados por el Banco Central estimaron que se ubicará en 48,3% promedio.
El ministro de Desarrollo Productivo, Matías Kulfas, tenía la expectativa de anunciarlo durante la primera semana de junio, pero la falta de una acuerdo lo llevaron a prorrogar hasta mañan el programa de “Precios Máximos”, que incluye artículos de la canasta básica,
La idea del Ejecutivo es lanzarlo en estos días y aún no está definido si se hará un lanzamiento con la presentación de todos los componentes de esa canasta o si se hará en etapas.
Lo que sí se sabe es que la implementación de este programa maracará el fin de los precios máximos, aunque -hasta el momento no se conoce a qué velocidad dejarán las góndolas en las que habitan desde marzo de 2020 cuando en el inicio de la primera cuarentena generada por el coronavirus una resolución ordenó imponer esa política sobre unos 300 productos que, lentamente, fueron escalando su precio o, simplemente, autorizados a desertar en especial los que no están en la canasta básica, como bebidas alcohólicas, o los 36 que dejaron esa lista en su última actualización como aceite de oliva, tostadas y grisines, edulcorantes, saborizadores, arroz (excepto largo fino), encurtidos, aceitunas y pickles, harinas leudantes y premezclas, horneables, pastas frescas, milanesas de soja, productos congelados en base a vegetales procesados y suplementos vitamínicos.
Otros productos que ya no están en la lista de los precios máximos son las tapas de empanadas y tartas, óleo calcáreo, apósitos y protectores mamarios, amargos, jugos, leche Infantil, queso rallado y queso crema, crema de leche, dulce de leche, manteca y margarina, yogur, postres y flanes.
A diferencia de otras intervenciones, esta vez se buca que el acuerdo alcance a los comercios barriales y a los supermercados chinos para lo cual se piensa en que los envases de los productos alcanzados se imprima el precio de venta, una medida que, según los fabricantes, complica la logística del acuerdo.
Esta medida se suma al reciente acuerdo con la industria láctea por el cual las usinas aportarán más de 27 millones de litros de leche subsidiados para aplanar los precios en las góndolas, una iniciativa que, según el Ejecutivo, amplía en el 45% la cantidad de productos de esta canasta que ya llega a 97 productos y 702 artículos acordados.
Sin embrago, la heladera de los derivados de la leche presenta remarcaciones que en el caso de las leches especiales para personas con problemas de intoleranciaya marcan una cota de 280 pesos el litro.
