“Es muy significativo que Brasil esté discutiendo los temas de reparación y aquellas políticas que trabajamos en la Argentina”, aseguró Horacio Pietragalla Corti, secretario de Derechos Humanos, en el marco del lanzamiento de la alianza “Coalición Brasil por la Verdad, Memoria, Justicia, Reparación y Democracia”.
El funcionario se mostró “con alegría y emoción” por participar, de forma virtual, de este lanzamiento. “Es muy significativo que Brasil esté discutiendo los temas de reparación y aquellas políticas que trabajamos en la Argentina, siguiendo la lucha de nuestras Madres y Abuelas de Plaza de Mayo, que nos da orgullo poder explicarlas y compartirlas con otros países”, planteó.
“Tenemos que estar alertas y organizados como región, usar nuevas estrategias porque también hay nuevas formas de persecución que tenemos que contrarrestar. Esta asociación es un gran inicio, un nuevo proceso y empuje. No queremos más dictaduras en ningún lado. Es un desafío poder emancipar las políticas de DD.HH en la región, porque esto se asocia a la defensa de los valores democráticos y de los procesos nacionales y populares que puedan surgir en nuestra Patria Grande. Estoy agradecido de poder formar parte”, reflexionó.
Esta semana en Italia, Pietragalla Corti participó de la primera audiencia en el marco del juicio que se le sigue al ex militar uruguayo Jorge Troccoli, ya condenado por los crímenes del Plan Cóndor durante la dictadura, y acusado ahora por los homicidios del argentino José Potenza y su pareja Rafaela Filipazzi. En ese país, se siguen además otros dos procesos por crímenes de lesa humanidad cometidos en la Argentina: el pedido de extradición del excapellán del Ejército Franco Reverberi Boschi y la causa contra el exmilitar Carlos Luis Malatto.
Pietragalla Corti también estuvo en Berlín, donde se reunió con el fiscal general Dirk Feuerberg, para “trasmitirle la voluntad del Estado argentino de impulsar la investigación que se sigue en ese país contra el exmarino Luis Kyburg”, imputado por crímenes de lesa humanidad cometidos en la Base Naval de Mar del Plata que está prófugo de la justicia desde 2013 y actualmente reside en en esa ciudad alemana.
Otros casos en el exterior que sigue con detenimiento el gobierno argentino son el juicio contra el represor Aníbal Gauto en Israel por crímenes que cometió en La Plata. En Brasil, hay un caso referido al represor Roberto Oscar González, que integró la patota que secuestró al escritor y periodista Rodolfo Walsh.
Recientemente, en Estados Unidos, el ex marino Roberto Guillermo Bravo fue condenado a indemnizar con US$27 millones a familiares de las víctimas de la Masacre de Trelew, en un juicio donde por primera vez se analizó la responsabilidad del exmilitar en la ejecución de 16 presos políticos.
