Lomas de Zamora: le regalaron un auto al cumplir 18 y se lo robaron

El auto robado en Banfield apareció en Monte Chingolo con sangre en los asientos, marcas de balas y sin dos ruedas.

Un joven sufrió el robo del auto que su familia le había regalado por su cumpleaños de 18 hace menos de un mes cuando tres delincuentes armados lo interceptaron cuando estaba por salir de su casa, le pegaron para bajarlo y escaparon en cuestión de segundos.

El robo ocurrió durante la noche del miércoles en Banfield, partido de Lomas de Zamora, y en las imágenes de las cámaras de seguridad que están a diposición de la Justicia se ve cómo Dylan estaba saliendo de su casa a bordo de un Clío rojo, cuando tres ladrones frenaron repentinamente el auto negro en el que iban y lo bajaron.

El violento episodio ocurrió en Roldán y Miguel Cané, en la puerta de la peluquería de Joana, que le había regalado el Renault Clio

El asalto ocurrió en pocos segundos: Los agresores bajaron del vehículo, increparon al joven de 18 años para que bajara del auto, e incluso llegaron a pegarle para que se apurara, para, finalmente, escapar a toda velocidad.

La víctima detalló que luego de unas horas de haber realizado la renuncia por robo, desde la comisaría 6° de Monte Chingolo, partido de Lanús les advirtieron que el auto estaba en esa zona.

Cuando lo fueron a buscar, el joven se encontró con un panorama desolador: su primer auto, el que le había regalado su familia por su cumpleaños de 18 de hace menos de un mes, tenía sangre, marcas de disparos, estaba chocado y tenía las ruedas pinchadas.

“Me pegaron un culatazo y una piña para bajarme del auto, me tuve que tirar al cordón lo más rápido posible. Cuando se fueron, hicieron un movimiento con las pistolas como si fuese una amenaza”, contó Dylan a una señal de noticias.

El joven contó que es la quinta vez que le intentan robar, por lo que dijo saber “cómo reaccionar ante estas situaciones y qué cuidados tener”. “Voy a buscar un lugar diferente. Voy a tratar de no dejarlo acá, es un peligro”, agregó.

En esa línea, detalló que todavía no hay detenidos por el robo y contó cómo fue el momento en el que se encontró el auto: “Tenía sangre en los asientos traseros, tres impactos de bala, estaba chocado y rayado. También le faltaban dos ruedas y supuestamente cuando llegó la policía a ver el auto había dos ruedas que estaba a tres cuadras de la escena y estaban pinchadas o reventadas”.

La hermana de la víctima, por su parte, lamentó: “Todos los días nos enteramos de algo nuevo, hay bastante impunidad. Duele ver que chicos de la misma edad que Dylan no tengan la misma perspectiva él. Tampoco les importa su propia vida. Él se esfuerza un montón para salir adelante. Nos cuesta un montón como a todos los que trabajamos”.

Dylan, que está en el último año de la secundaria, trabaja como repositor en un kiosco y también había ahorrado para comprar el Clio, admitió: “Tuve suerte de que no me dispararon”.