Más de 5 millones de argentinos no completan sus comidas diarias

En el "granero del mundo" hay tres millones de chicos en la indigencia. Menores de 14 años y mayores de 65 son las víctimas de la decadencia argentina.

inflación pobreza

En la Argentina de 2024 hay más de cinco millones de personas que ya estarían en la indigencia, es decir, que no alcanzan a consumir las calorías diarias que su organismo necesita para desarrollarse en condiciones saludables.

En otras palabras, cinco millones de compatriotas pasan hambre y, entre ellos, tres millones son niños según indican las proyecciones de los datos de la última información oficial que difundió el INDEC con relevamientos realizados hasta el tercer trimestre del año pasado.

Esos números empeoraron de la mano de la disparada de la canasta alimentaria en medio de la devaluación del 54% aplicada por el gobierno del reaccionario Javier Milei apenas tres días después de asumir.

La devaluación del 118% explicó en buena medida que el costo de vida haya subido 25,5% en diciembre aunque ya después de las PASO de agosto de 2023 bajo la gestión del trío peronista Alberto Fernández, Cristina Kirchner y Sergio Massa se había producido una primera devaluación en un marco de alza continua de la inflación.

Eso provocó, según el INDEC, que en el tercer trimestre del año pasado la cantidad de indigentes subiera de 3,7 a 4,6 millones. Es decir, en 2023 la gestión de Unión por la Patria hizo caer en la miseria a 900 mil personas. Pasó del 8% al 9,9%.

Los datos del cuatro trimestre aún no fueron informados por el INDEC, pero teniendo en cuenta lo ocurrido con la primera devaluación, está claro que la segunda depreciación del peso a principios de diciembre, combinada con la feroz disparada de precios, sumergió en la indigencia a otros cientos de miles de personas.

El dato concreto se conocerá cuando lo informe el INDEC a fines del verano, pero especialistas que siguen el derrotero del deterioro social confirman que la indigencia ya afecta a más de cinco millones de personas, sobre todo teniendo en cuenta que el Gobierno neoconservador de Javier Milei le informó al FMI que la pobreza ya afecta a la mitad de la población.

Cinco millones de indigentes no llegan a completar las comidas diarias

A fines del tercer trimestre, el 38,5% de la población había pasado a vivir por debajo de la línea de pobreza en relación al 37,7 % de igual período de 2022, de acuerdo con el procesamiento de los microdatos de la EPH (Encuesta Permanente de Hogares) que difundió el INDEC.

Son casi 18 millones de pobres.

Por todo esto, se descuenta que tras la mayor devaluación de diciembre, y la mayor disparada de los precios de los alimentos y gastos básicos, la indigencia y la pobreza pegaron otro salto en el cuarto trimestre de 2023, y más todavía están subiendo en este primer trimestre de 2024.

Con esos cálculos puede estimarse que, cuando termine este trimestre, la pobreza rondará el 55% y la indigencia el 15%.

Por edades, con el 54,8% sobresale la pobreza infantil de menores de 14 años versus un 51,7% en el tercer trimestre de 2022, mientras la indigencia infantil aumentó del 11,8 al 15,6%, al dar un salto grande.

El aumento de la indigencia se produjo entre todos los rangos de edades, mientras la pobreza creció entre los menores de 14 años y los mayores de 65 años, en este caso, por la pérdida del poder de compra de los haberes.