El inicio del ciclo lectivo enfrenta una instancia de incertidumbre debido a la falta de confirmación sobre la realización de la paritaria nacional entre el Gobierno federal y los gremios docentes. Luego de idas y venidas, se sigue postergando el encuentro, lo que pone en peligro el comienzo de las clases.
Carlos Torrendel, secretario de Educación de la Nación, volvió a demorar el inicio de las negociaciones, que han sido confirmadas y desmentidas en varias ocasiones por diferentes funcionarios del área, e incluso por el propio presidente Javier Milei, que le adjudicó responsabilidad exclusiva en materia educativa a las provincias.
La situación se agrava con el anuncio del Gobierno de que no enviará el dinero del Fondo Nacional de Incentivo Docente (Fonid) a las provincias. Este fondo, que cubre entre el 10 y el 15% de los salarios del sector, es crucial para muchas provincias que dependen de él para pagar los salarios de los docentes. Tampoco transfirió los aportes de Conectividad y Material Didáctico y el Fondo de Infraestructura, según advirtieron los 24 ministros de Educación provinciales
Además, no enviará a las provincias el fondo de Compensación Salarial Docente, que ayuda a las provincias que no alcanzan a cubrir el valor del haber mínimo, que actualmente está en 250 mil pesos. Este recurso es vital para provincias como Catamarca, Chubut, Corrientes, Jujuy, La Rioja, Misiones y Santiago del Estero.
Esta semana, la secretaria general de la Confederación de Trabajadores de la Educación de la República Argentina (CTERA), Sonia Alesso, advirtió que las clases no comenzarán sin los fondos del Gobierno nacional. En este contexto, este martes se llevará a cabo una reunión entre cuatro sindicatos docentes que forman parte de la CGT: la Unión de Docentes Argentinos (UDA), Asociación del Magisterio de Enseñanza Técnica (AMET), Sindicato Argentino de Docentes Privados (SADOP) junto con la CTERA, en un intento por unificar criterios ante la inminencia del inicio del año escolar.
