Temen que tras los comicios comiencen a ejecutar hipotecas

La advertencia llega desde el Colegio de Martilleros de la provincia de Buenos Aires, tras el encuentro de Hipotecados UVA.

Del sueño de la casa propia a la pesadilla. Tomaron créditos para adquirir viviendas, pero la inflación impactó de lleno en las cuotas y se incrementó sensiblemente la suma que deben devolver. Desde el Colegio de Martilleros de la provincia de Buenos Aires advierten que tras las elecciones, los bancos podrían comenzar a ejecutar las hipotecas.

El presidente del Colegio de Martilleros bonaerense, Juan Carlos Donsanto, advirtió que más de 200 mil familias bonaerenses que tienen créditos hipotecarios podrían “perder sus viviendas” por el alza de las cuotas a raíz de la inflación, y reclamó medidas para absorber parte de la deuda de esos préstamos. “Si el 93% de los créditos se hicieron a través de bancos oficiales, esto se puede arreglar con un decreto o una ley que proponga el sector político”, indicó, según consigna la agencia NA.

Consideró que las entidades bancarias no realizarán movimiento en tiempos de elecciones, pero alertó que podrían accionar una vez que pasen los comicios. “Ahora estamos en época electoral y no va a pasar nada, pero después de las elecciones, los bancos, especialmente los privados, a no dudarlo, podrían comenzar a ejecutar las hipotecas y atrás de los 200 mil bonaerenses tomadores de crédito están también los garantes”, alertó.

El grupo Hipotecados-UVA de la provincia de Buenos Aires organizó un evento en el que participaron legisladores nacionales y provinciales “Para los que tenemos memoria fue inevitable asociarla con la Circular 1050 y por eso sostuvimos desde el principio que este esquema tornaba impagables los créditos y por tanto se estaba ante una estafa”, remarcó Donsanto.

Desde el Colegio de Martilleros precisaron que “la Circular 1050, emitida en 1980, estableció un tipo de préstamo por el que las deudas se indexaban a partir de la tasa de interés vigente en el mercado. Pero como esos intereses fueron muy elevados en términos reales, el crecimiento de la deuda era mucho mayor a la evolución de los ingresos. De hecho, hasta llegaba a superar a la propia cotización de las viviendas”.

Hace  algunos días, el Gobierno anunciaba el relanzamiento de los Créditos Procrear y desde Hipotecados UVA manifestaron su rechazo porque “el mecanismo promocionado ya ha demostrado que no es viable y que carece de previsibilidad y razonabilidad”.

“Carece de previsibilidad porque, al indexarse la cuota y el capital por inflación, se desconoce a lo largo del crédito el importe que se debe abonar mensualmente, como así también el capital que se terminará devolviendo al Banco”, detallaron en un comunicado. Apuntan que “la falta de razonabilidad está dada porque éste gobierno ha demostrado su incapacidad para domar la inflación, y la prueba cabal de ello es que la inflación interanual se ubica en el 57,3%. Con ese nivel de costo de vida, es imposible para una familia poder planificar su proyecto de vida, frente a créditos que deberán afrontar por 30 años”.

Explican, en ese marco, que si a la tasa fija del 7,5 por ciento se le acumula mes a mes la variación del CER, tanto en la cuota como en el capital, estos créditos se transforman, en el corto plazo, en “una bomba de tiempo para los deudores”.

En esta oportunidad, los créditos incorporan una cobertura de seguro -cuya prima estará a cargo del deudor-, y que equivale al 1,5 % del valor de la cuota. “A simple vista podría interpretarse como una suerte de protección para el deudor, pero no es así, dado que el seguro cubrirá únicamente el porcentaje que supere en un 10 % la variación del CVS (Coeficiente de Variación Salarial). Es decir, si el CER superara en un 12 % la evolución del CVS, la cobertura sería sólo por el 2 %. Indudablemente se trata de una cobertura para los bancos, que sale del bolsillo de los hipotecados. Una verdadera distribución regresiva del ingreso desde los más vulnerables -los hipotecados- hacia los bancos oficiales”, señalaron.

Consideran que “anunciar nuevos créditos ajustados por inflación cuando desde el Estado se practica un cepo a los salarios, con topes en la Negociación Colectiva, y cuando se ha demostrado una impericia absoluta para domar la inflación, es una medida perversa, que lejos está de constituir una verdadera política pública de viviendas para paliar el déficit habitacional que azota a miles de familias argentinas”. “No dejaremos de denunciar que estos créditos son inviables y que están pensados únicamente sobre la lógica de otorgarles previsibilidad al sistema financiero, hundiendo en un mar de incertidumbre a los hipotecados”, alertan.