Reclaman mejoras de infraestructura en el Julián Aguirre

Se movilizaron al Consejo Escolar lomense y suspendieron las clases hasta que no se garanticen mejoras edilicias.

La trágica explosión en la escuela de Moreno que dejó el saldo de dos personas muertas despertó la alerta en toda la comunidad educativa bonaerense y los reclamos por problemas de infraestructura comenzaron a multiplicarse rápidamente.

En el caso del Conservatorio Julián Aguirre, que fue fundado el 1951 y desde entonces ha formado generaciones y generaciones de docentes y músicos de diferentes partes de la provincia, alumnos y docentes decidieron movilizarse al Consejo Escolar de Lomas de Zamora para exigir que se garanticen mejoras edilicias y poder retomar el normal dictado de las clases.

Es que, desde la semana pasada los docentes, delegados gremiales, estudiantes y autoridades resolvieron por unanimidad que había que cerrar el conservatorio “hasta que no se acerque una persona idónea que pueda garantizar” las condiciones edilicias porque denuncian que las paredes y los techos están repletos de humedad, hay filtraciones de agua, la instalación eléctrica es obsoleta y algunas estufas tienen pérdidas de gas.

“Entendemos que cerrando el conservatorio y movilizar a la comunidad es un elemento de presión para que los funcionarios reaccionen. Si no hay respuestas, la idea es mantener el conservatorio cerrado para que haya una partida de emergencia”, sostuvo en diálogo con Info Región el docente del conservatorio y delegado de SUTEBA Luis Attanasio.

Attanasio explicó que si bien el Consejo local tomó cartas en el asunto, “mandan gente tercerizada y solo se reparan parches”. “Cuando no hay quien garantice la seguridad de los que estamos trabajando y estudiando es obvio que se suspenden las clases. Había sobrados motivos para decir basta”, manifestó.

Además, desde el conservatorio indicaron que de un total de 30 aulas, habían 11 que estaban en muy mal estado y no se podían utilizar. “Al tener 30 aulas disponibles en una población de 1800 alumnos que a su vez comparte el edificio con una escuela primaria desde hace 70 años, le sacas un tercio de las aulas”, indicó el representante de Suteba.

“La idea era que se alternaran las clases y los chicos que vayan una semana no tengan que ir a la otra en tanto y en cuanto el Consejo Escolar hiciera las reparaciones inmediatas, pero la idea era inviable porque iba a generar malestar en la comunidad educativa y no se iba a poder sostener”, evaluó.