El Sindicato Argentino de Docentes Privados (SADOP) bonaerense se declaró en “estado de alerta” por la continuidad de la presencialidad escolar en la modalidad de Educación Especial y advirtió que tomará medidas de fuerza si no se revierte esta situación al denunciar “la grave discriminación a la que están siendo sometidos docentes, estudiantes y toda la comunidad educativa de la modalidad” al ser convocados a la presencialidad “en el peor momento de la pandemia”.
El sindicato presentó una nota ante la Dirección General de Cultura y Educación que conduce Agustina Vila para que la administración bonaerense revea la postura al respecto y, al mismo tiempo, anunció que se evalúan medidas de fuerza.
Por su parte, el Sindicato Único de Trabajadores dela Educación de Buenos Aires (SUTEBA), junto al resto de las Organizaciones Sindicales que conforman el Frente de Unidad Docente Bonaerense (FUDB), presentaron una carta a la Directora General de Cultura y Educación, Agustina Vila, en la que solicitaron la suspensión de las clases presenciales debe aplicarse en Educación Especial.
“Cuando se suspende la asistencia a las clases presenciales, debido a una situación de alarma epidemiológica y sanitaria localizada, esta medida debe incluir a todas y todos las y los estudiantes de las instituciones educativas que se encuentran en el territorio afectado. No hay razones, ni existen fundamentos, que justifiquen suspender las clases presenciales de las y los estudiantes de los niveles y no hacerlo con las y los estudiantes de la modalidad educación especial (sic)” sostiene la misiva a la responsable de la administración educativa bonaerense.
Además, los educadores de la Provincia solicitaron “que se lleve a Nivel Nacional (sic) la preocupación de la Provincia de Buenos Aires y sea tenido en cuenta en el próximo DNU”.
Según datos oficiales, en la Provincia son aproximadamente 70 mil los estudiantes que asisten a la modalidad Especial en todos los niveles educativos.
