“Vamos a trabajar para tener un presidente radical”


La Convención Nacional de la Unión Cívica Radical ratificó esta tarde su aspiración de que sea un integrante de la UCR quien encabece la fórmula presidencial de la coalición opositora Juntos por el Cambio de cara a las elecciones de 2023 por lo que exhortó a “mantener unida y mejorar” la alianza pese a admitir que se transitarán “inevitables tensiones y disputas”.

“Lo afirmamos con toda claridad: Vamos a trabajar para tener un presidente radical. Vamos a trabajar para dar gobernadores radicales a todas las provincias. Vamos a hacer todo lo que esté a nuestro alcance para que el próximo Jefe de Gobierno de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires sea radical”, recalcó el documento suscripto por los más de 300 convencionales que asistieron al teatro platense Coliseo Podestá donde se eligió al abogado bonaerense Gastón Manes como nuevo presidente de su máximo organismo.

En un documento de ocho páginas, el radicalismo defendió la idea de fortalecer Juntos por el Cambio para “hacerla todavía más amplia” y puso de relieve que el próximo gobierno “tiene que tener una coalición integrada”.

“Ahora trabajamos por la unidad para ganar y para gobernar. Y ello es inseparable de la voluntad de compromiso que requiere el respeto de las reglas que regulan la coalición y la subordinación de las pasiones y las ambiciones al logro del objetivo común: sacar a este país de la espiral de la decadencia”, señalaron en el texto los convencionales.

El documento desgranó también críticas al Gobierno nacional y a su “modelo agotado” al tiempo que consideraron que “además del ordenamiento macroeconómico, las políticas del Estado tienen que brindar el marco adecuado para el impulso: reforma del sistema impositivo, estímulos y facilidades para la inversión, simplificación y facilidades para primeros empleos, formación específica para el trabajo”.

“Quienes nos dedicamos a la vida pública tenemos que tener un comportamiento transparente y ejemplar”, remarcaron en una clara alusión a las violaciones por parte del Presidente y de su esposa de las disposiciones decretadas durante la pandemia.

“Nos enorgullecen los avances que están haciendo los mendocinos, los correntinos y los jujeños. Con los gobiernos radicales esas provincias potenciaron sus sectores productivos, mejoraron la educación, impulsaron las energías alternativas, trajeron inversiones, se proyectan al mundo”, destacó el documento.

En el plano internacional, postularon la necesidad de que Argentina logre una “inserción inteligente en el mundo” a través de la concreción de “acuerdos comerciales y políticos en todos los continentes”, además de “fortalecer el Mercosur” y “profundizar la integración latinoamericana”.

“Argentina debe condenar sin ambivalencias las dictaduras, las pseudo democracias, los gobiernos que reprimen la libertad y violan los derechos humanos”, plantearon los convencionales quienes reafirmaron su “total condena a la invasión de Rusia a Ucrania”.

Para la UCR “la endeblez intelectual para marcar un rumbo y diseñar políticas acordes, ha llevado a la Argentina a una situación crítica” y adjudicaron al kirchnerismo una “escasez de valores e ideales claros” y “debilidad de una visión de para qué se quiere gobernar”.

La Convención responsabilizó al Ejecutivo por los “resultados catastróficos” en la economía y cuestionó la implementación durante la pandemia de un “encierro injustificadamente prolongado”.

“No queremos una sociedad de engranajes corporativos para que nos pasen los años mansamente. En la búsqueda de esos valores irrenunciables como personas tenemos que pasar de un Estado ineficaz y anómico a un Estado inteligente y competente. Que le facilite la vida a las personas y les permita desarrollar sus propias potencialidades y buscar su propia felicidad, cualquiera sea”, concluye el documento.

La puja por el poder dentro de la UCR

La UCR bonaerense liderada por el diputado provincial Maximiliano Abad conformó junto con el jujeño Gerardo Morales un eje de poder que logró imponer a Gastón Manes, hermano de Facundo, el neurólogo y probable presidenciable, al frente de la convención en el marco de una lista de unidad a la que se integraron los sectores encabezados por el mendocino Alfredo Cornejo y el porteño Martín Lousteau.

En esa negociación, además del presidente, el oficialismo de Morales, Abad y del gobernador correntino Gustavo Valdés se quedó con seis integrantes de la conducción, Lousteau tendrá cuatro y Cornejo, tres para lo cual ampliaron la mesa a 13 miembros y crearon una vice primera y una secretaria general.

Tras ser electo presidente de la convención Manes sostuvo que la UCR no “solo debe ser la columna vertebral sino la cabeza y el alma de la coalición que va gobernar en 2023”.

Manes también marcó diferencias con sectores del PRO al precisar que “una agenda de futuro nunca puede ser resultado de una perspectiva extremista. La profundidad de las transformaciones que el país necesita no pueden ser resultado de un ejercicio de marketing y la construcción de futuro puede ser un slogan, sólo la UCR puede liderar el camino que estamos transitando”, enfatizó.

“Sin centro político corremos el riesgo estamos condenados a que el ruido reemplace el diálogo. El centro político es un proyecto de transformación incluyente. Venimos a hacernos cargo de encabezar el espacio que cambie a la Argentina y a los populistas les tocará perder, a los de izquierda y a los de derecha”, apuntó.

En ese sentido, remarcó que la UCR no es “un partido testimonial, sino un partido de Gobierno”, y agregó: “Vamos a convocar desde el centro popular y no desde los extremos, tenemos la experiencia de liderar tres gobernaciones y más de 400 intendencias, llegó la hora que sea una coalición de ideas”.