Jaguares culminó su paso por el Súper Rugby con una derrota 19-3 como visitante de Crusaders de Nueva Zelanda, en lo que tradujo consolidarse en un segundo lugar histórico luego de cumplir su cuarta participación en este nivel de competencia.
El equipo comandado por Gonzalo Quesada quedó a un paso de la coronación, pero la franquicia oceánica fue más contundente en un encuentro cerrado, lo que le sirvió para alcanzar su tercer título consecutivo.
No pudo ser
El buen rendimiento de Jaguares y el progreso en el juego desde el primer día en la competencia, los llevaron a protagonizar el partido definitivo del certamen. Crusaders, el mejor de la fase regular, acostumbrado a este tipo de instancias, logró imponerse al golpear en momentos claves.
El encuentro fue cerrado y sólo hubo un try, pese a enfrentar a los dos equipos más goleadores del certamen. El hooker Codie Taylor marcó la diferencia al apoyar en el ingoal albiceleste, en tanto que la pegada de Richie Mo’unga, quien aportó 14 puntos, fue fundamental en el desenlace de las acciones.
Por el lado de Jaguares, contaron con dos oportunidades que estuvieron en las manos de Matías Moroni. La primera de ellas fue desde la elaboración de Pablo Matera, pero tacklearon al jugador argentino a centímetros de la zona de conversión rival. En la otra ocasión no llegó a alcanzar un arriesgado kick de Domingo Miotti. De esa forma se quedaron con las manos vacías, aunque realizaron un certamen que quedará en el recuerdo y una final más que digna ante la franquicia más poderosa del torneo.
La palabra
Al finalizar el partido los jugadores conversaron con los medios y coincidieron en el poderío de su oponente, pero también mostraron alegría por el paso enorme que dio la franquicia esta temporada.
“Siento orgullo por este equipo porque estuvimos a la altura y nunca dudamos de nosotros. Obviamente sabíamos lo que es Crusaders, la cantidad de finales ganadas que tienen y del oficio que poseen para jugar este tipo de partidos”, apuntó Jerónimo De la Fuente.
Por otra parte, sobre el desarrollo, valoró: “Fue un partido donde pusimos en aprietos a Crusaders. Ellos aprovecharon sus oportunidades. Nosotros tuvimos dos situaciones claras también, que si las hubiésemos convertido en puntos, el partido quizás hubiese sido otro”.
