Comienza este mes el juicio a Carrazzone por el femicidio de Stella Maris Sequeira

La primera audiencia está pautada para el 31 de marzo. La mujer desapareció en 2016.

El Tribunal Oral en lo Criminal Federal 2 de La Plata anunció que el juicio contra Rubén Carrazzone por el femicidio de Stella Maris Sequeira en 2016 (su cuerpo nunca fue hallado) comenzará el 31 de marzo.

De acuerdo a la resolución judicial, a la que tuvo acceso Info Región, se fijaron tres audiencias: 31 de marzo, 7 y 14 de abril. Comenzarán a las 10 y está prevista la presencia del imputado y las partes en la sala de audiencias.

El abogado está acusado de “homicidio doblemente calificado por haberse cometido sobre su pareja conviviente y mediando un contexto de violencia de género y de falsa denuncia” de secuestro.

Stella Maris Sequeira desapareció en Ezeiza el 29 de diciembre de 2016, el día previo a su cumpleaños, y nada se sabe de ella desde ese momento. Carrazzone denunció haber recibido un llamado extorsivo, aludiendo a un presunto secuestro, pero la hipótesis fue descartada.

Buscaron el cuerpo de Stella Maris con georradares y perros en la vivienda de la calle Ombú al 700 de El Trébol, partido de Ezeiza, pero no encontraron rastros de ella.

El abogado denunció el hecho recién el 31 de ese mes y, un día después, aseguró haber recibido un llamado extorsivo en el que le exigieron 80.000 dólares para liberarla. Sin embargo, la pesquisa determinó que se había tratado de una falsa denuncia. Miguel Ángel Franco había sido detenido por el “secuestro extorsivo”, pero el juez Santa Marina lo sobreseyó por este delito y lo imputó por “encubrimiento agravado” de lo que sería el femicidio de la mujer de 61 años.

Si bien Carrazzone siempre negó hechos de violencia contra su mujer, para el juez que intervino en la instrucción del expediente, existen elementos suficientes para acreditar que el abogado penalista la golpeaba. En tanto, una testigo que declaró en la causa relató que el día previo a su desaparición, la víctima le había contado que iba a separarse del abogado y que éste se tendría que ir de su casa “con un bolsito”, como había llegado hacía muchos años.