“Ojalá nunca lo necesites, pero si estás pasando por esto sabe que hay un lugar lleno de amor para recibirte”. “Pasar por esto” es algo que ni siquiera se puede nombrar: la muerte de un hijo o hija.
La frase pertenece a los integrantes de Renacer, un grupo de padres que han sufrido la muerte de al menos un hijo, porque hay casos en que la pérdida ha sido de más de uno, y que se reúnen en Lomas de Zamora y Monte Grande para darse cobijo mutuamente.
Son personas golpeadas por la vida del peor modo posible. Un impacto que los ha dejado en una condición que no tiene palabra para designarla, pero que están dispuestas a seguir adelante pese a todo. Con ese desafío, el de “trascender al dolor”, conformaron grupos en el que los padres se ayudan mutuamente logrando herramientas para continuar en el camino “en honor a sus hijos”.
No hay fórmulas, pero sí, afirman, “herramientas para salir adelante”, que están dispuestos a compartir con personas que sólo pueden saber lo que se siente porque han atravesado por la misma situación.
En Lomas de Zamora el grupo se reúne en Darragueria 275, Banfield, los miércoles de 17 a 19hs y en Esteban Echeverría el encuentro se lleva a cabo los sábados de 17 a 19 en la calle Robertson 451 de Monte Grande.
Los integrantes de ambos grupos, además, ponen a disposición sus propios teléfonos para aquellos que están atravesando una situación así o para quienes tienen algún amigo o familiar que ha perdido un hijo y pretendan ayudarlo, porque es común que el dolor sea tan invalidante que impida incluso el acto reflejo de pedir ayuda.
En Lomas, quienes ofrecen sus teléfonos son de Viviana (15-3446-1536), Roberto (15-5857-0531), Alicia (15-6569-2725) o Aldo (1568125194)
En tanto que en Monte Grande están disponibles Viviana (15-3446-1536), Leo (15-4406-0150), Celeste (15-5810-1529) y Lía (15-6439-4467)
