Otra escuela privada en riesgo de cierre: ahora, en Esteban Echeverría

trabajadores del Vicente Francisco Saperi de Monte Grande,se reunirán mañana a partir de las 7.45 para dar un abrazo simbólico al colegio que corre riesgo de cerrar sus puertas.

Saperi Monte Grande

La comunidad educativa del complejo Vicente Francisco Saperi de Monte Grande, en el partido de Esteban Echeverría, se reunirá mañana a partir de las 7.45 para dar un abrazo simbólico a ese colegio que “corre riesgo de cerrar sus puertas debido a la situación económica del país”..

Ubicado en Pellegrini 1751, el Saperi agrupa los tres niveles de enseñanza y está orientado en artes y comunicación audiovisual.

“Lamentablemente nuestro querido colegio corre el riesgo de cerrar sus puertas, apenas puede subsistir, y afrontar los costos se vuelve una tarea titánica -casi imposible de lograr- La inflación y el pago del bono asignado por el gobierno dificultan aún más la situación”, explica una de sus docentes a este diario.

El Saperi se suma así, al IMSA de Avellaneda a la hora de enumerar colegios privados que están al borde de cerrar sus puertas.

Tal como lo reveló InfoRegión, un relevamiento realizado en las últimas semanas en la provincia de Buenos Aires advierte que por lo menos 30 colegios de gestión privada están con “serio riesgo de cierre definitivo”.

Son institutos de San Miguel, Almirante Brown, Lomas de Zamora y Esteban Echeverría, en el conurbano. Pero también figura un jardín de infantes de Bahía Blanca y otra entidad educativa de Mar del Plata y otro de San Nicolás, según indicaron en la Asociación de Instituciones Educativas de Buenos Aires (Aiepba) donde aclararon que los nombres no será difundidos para “preservar a la comunidad educativa, directivos y docentes”.

La encuesta que pone en alerta a la educación privada

“Se envió una encuesta a poco más de 200 centros de enseñanza subvencionados y en 30 casos la conclusión es que deberán suspender las actividades en forma permanente”, explicó el director ejecutivo de esa entidad, Martín Zurita, quien precisó que estos establecimientos podrían dejar de funcionar por inconsistencias financieras, morosidad con organismos estatales como, por ejemplo, previsionales e impositivos, o por morosidad en el cobro de las matrículas.

Las escuelas arrastran una compleja situación desde la pandemia de Covid, donde muchos propietarios y administradores tuvieron que tomar deudas y créditos para seguir funcionando. De acuerdo con la información de la entidad, desde la crisis de Covid se cerraron 80 centros educativos de distintos niveles y modalidades”.

A ese grupo de colegios que podrían dejar de funcionar o no abrirían el ciclo lectivo 2024 asisten 9.570 alumnos y allí trabajan 1.131 maestros o profesores. Todas tienen algún nivel de subsidio del Estado para pagar sueldos.

Según la encuesta de Aiepba: el 56% mantiene deudas con el Instituto Previsional de la Provincia (IPS); 35% adeuda cuotas a la AFIP y la mitad registra un porcentaje de retraso en el pago de las cuotas de hasta 40% de los inscriptos.

El sistema de educación privado está conformado por 6.294 unidades que atienden la educación de 1.516.300 estudiantes de todos los niveles. Hay 265 mil niños en jardines; 620 mil en primaria y 520 mil en secundaria.

El salario del miedo

El 80% de esos centros recibe fondos estatales para pagar el 40; 60; 80 o 100% de los sueldos de docentes. Pero el resto de los costos operativos se financian con los aranceles.

“Cada vez se amplía más la brecha entre lo que pueden cobrar los colegios y los incrementos en costos salariales. Entre lo que no se pudo recuperar de 2023 y el acumulado del 2022, la pérdida de capacidad de financiación por cuota mensual está un 27% por debajo del costo que tienen que afrontar los colegios para pagar los haberes de maestros y profesores”, explicó Zurita.

En el sector remarcan que muchas instituciones no pueden trasladar el aumento arancelario que tienen autorizado porque las familias “están exhaustas y en muchas comunidades no pueden afrontarlo”.

La institución que agrupa a más de 2.300 establecimientos privados en Buenos Aires cuestionó medidas que provocaron distorsiones financieras en la administración de los colegios como la inclusión de los colegios en el programa de Precios Justos y también a la decisión unilateral e inconsulta de obligar a todos los establecimientos a pagar el bono extraordinario dispuesto por el Ministerio de Economía.

El 90% del costo de funcionamiento de un colegio es el pago de sueldos. “Con el último incremento salarial del 30%, más la suba en las asignaciones familiares, y la incorporación de nuevas licencias al personal, se hace necesaria una actualización de aranceles o algún otro tipo de medida que contribuya a aliviar la situación delicada que vienen atravesando cientos de colegios”, explicaron en el sector.

En Aiepba muestran estas variables que complican el ejercicio diario en instituciones. Entre diciembre de 2021 y mayo de 2023 los sueldos subieron 197,8%; la inflación según Indec fue del 177% y cuotas de institutos, 143,8%.

“Tenemos decenas de casos de directivos que se endeudaron en la pandemia y aún no se pudieron recuperar”, detalló el dirigente de Aiepba.