Cuatro presos que se encontraban alojados en una comisaría de la localidad de Dock Sud, partido de Avellaneda, se fugaron luego de cortar los barrotes de las celdas mientras se disputaba el encuentro entre Boca Juniors y River Plate, informaron hoy fuentes policiales.
Se trata de cuatro delincuentes condenados que se encontraban detenidos en la Comisaría 3era. de Avellaneda a la espera de ser trasladados a un penal del Servicio Penitenciario Bonaerense (SPB).
Según explicaron los voceros, los cuatro tenían condenas de larga duración y habitaban el calabozo número 4 de la dependencia junto a otros dos internos.
Al respecto, los informantes señalaron que aquella celda es la más alejada del ayudante de guardia, a la vez que precisaron que el escape se dio mientras se disputaba en La Bombonera el superclásico del fútbol argentino, correspondiente a la séptima fecha de la Copa de la Liga Profesional.
La fuga
Fuentes policiales explicaron que los delincuentes planificaron la fuga al pedir autorización para pintar un sector de la comisaría.
A raíz de ello, los presos lograron ingresar a la celda de contrabando elementos cortantes dentro de uno de los tachos de pintura, al cual le colocaron un bajo fondo. Con esas herramientas, los internos aprovecharon para cortar los barrotes y luego darse a la fuga por uno de los accesos secundarios de la comisaría.
Según las fuentes, los efectivos de la zona estaban desplegando distintos operativos para dar con el paradero de los fugados y se dispuso la comunicación a los distintos órganos judiciales que los tenían detenidos a su disposición.
Antecedes de fugas
A comienzos de septiembre, cinco detenidos escaparon de la comisaría segunda de Lanús, ubicada en ubicada sobre la calle Gral. Bernardo O’Higgins al 1800. También limaron los barrotes y escaparon por la puerta principal de la dependencia.
En julio paso, hubo un intento de fuga en una comisaría de Quilmes. Cuatro detenidos aprovecharon el momento que el oficial de guardia le abrió la puerta de uno de los calabozos para que pudieran ir al baño. El efectivo fue reducido y atacado a golpes de puños, por lo que otro policía que vio la situación alertó a sus compañeros.
