Recrudece la tensión. Irán atacó una base militar de Estados Unidos en Irak. Desde la Guardia Revolucionaria advierten que son 80 los muertos, mientras que el presidente Donald Trump desmintió que haya víctimas fatales.
Irán lanzó ayer al menos 10 misiles contra instalaciones militares estadounidenses en Irak y advirtió que ese fue el primer paso de la “dura venganza” por el reciente asesinato de su general Qasem Soleimani.
Desde Irak confirman que al menos 13 misiles impactaron en la base aérea Al Assad, donde se alojan soldados norteamericanos desplegados en el contexto de la coalición internacional, encabezada por Estados Unidos, de lucha contra la organización yihadista Estado Islámico (EI).
Esto provocó una reunión urgente en Washington entre el presidente Donald Trump y sus secretarios de Estado, Mike Pompeo, y de Defensa, Mark Esper. “Está claro que estos misiles fueron lanzados desde Irán y dirigidos contra al menos dos bases militares iraquíes”, informó un comunicado del Pentágono firmado por su portavoz Jonathan Hoffman.
Versiones encontradas
“¡Todo está bien! Misiles lanzados desde Irán en dos bases militares ubicadas en Irak. Evaluación de víctimas y daños que tienen lugar ahora. ¡Hasta aquí todo bien! ¡Tenemos el ejército más poderoso y bien equipado en cualquier parte del mundo, con diferencia! Haré una declaración mañana por la mañana”, dijo el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, esta noche en su cuenta de Twitter.
En tanto, un responsable de la Guardia Revolucionaria de Irán aseguró hoy que los ataques con misiles lanzados anoche contra dos bases militares iraquíes que albergan fuerzas estadounidenses mataron a unos 80 militares norteamericanos. “Al menos 104 objetivos de las posiciones de los estadounidenses y sus aliados en la región han sido identificados y si los estadounidenses vuelven a cometer un error, esas posiciones serán atacadas”, afirmó.
Javad Zarif, ministro de Asuntos Exteriores de la República Islámica de Irán, advirtió que “Irán tomó y concluyó medidas proporcionadas en defensa propia”. Según precisó, desde esa base “se lanzaron ataques armados cobardes contra ciudadanos y altos funcionarios iraníes”. “No buscamos la escalada o la guerra pero nos defenderemos de cualquier agresión”, completa.
El lunes, la ciudad yemení de Sadah al noroeste del país, fue testigo hoy de una masiva manifestación en contra del asesinato del comandante más poderoso de Irán, Qasem Soleimani, y del jefe de una de las principales milicias chiitas en Irak, Abu Madhi al Muhandis, en un ataque estadounidense en Bagdad el viernes pasado.
