Ester Argañaraz es una vecina de San Vicente y vivió momentos de suma preocupación cuando su su hija presentó síntomas de Covid-19 pero su obra social no le brindó asistencia. La derivaron a una clínica de Almirante Brown, pero no la trasladaron. Ante la desesperación por obtener una respuesta, madre e hija recurrieron al hospital Dr. Ramón Carrillo de San Vicente y logró que le realizaran el estudio. “La obra social se lavó las manos olímpicamente”, criticó la mujer.
Relató a Info Región la odisea que pasó su hija como consecuencia de la falta de respuesta por parte de la obra social, OSECAC. “Mi hija empezó con síntomas y se comunicó con el 148, ahí la respuesta que le dieron fue que se quedara aislada y se comunicara con su obra social y fue lo que hizo inmediatamente pero le contestaron recién a la noche cuando se comunicó por mensaje de texto”.
“En el mensaje de texto le decían que debía presentarse en la Clínica Espora de Adrogué, siendo que somos de San Vicente. Le dijeron que tenía que estar a primera hora con una muda de ropa porque posiblemente era necesario internarla y ahí le iban a hacer el hisopado, y claro que debía moverse por sus propios medios”, planteó la mujer.
A pesar de lo que implicaba trasladarse de San Vicente a Almirante Brown, su hija lo hizo, pero al llegar a la clínica se encontró con que lo que le habían informado desde la obra social no era cierto. “Se tomó un remis hasta la Espora y cuando llegó, le dijeron que ahí no estaban realizando el hisopado y le advirtieron que la obra social se estaba manejando muy mal y se tuvo que volver a su casa, con síntomas y sin respuestas”, aseguró indignada Ester.
Volvieron a insistir con OSECAC, a través de la línea telefónica y esta vez la respuesta que “ debería trasladarse a un hotel en Congreso, porque ahí es donde estaban haciendo los hisopados, sin ninguna otra información”. “Se lavaron las manos olímpicamente”, reprochó.
Ante la falta de asistencia por parte de la obra social, Ester recurrió al sistema de salud público, donde logró que atendieran a su hija. “Después de averiguar e insistir mil veces con la obra social, logré comunicarme con un número del Municipio y me derivaron al hospital de San Vicente, ahí por fin le realizaron el hisopado y la mandaron con aislamiento al domicilio, pero la obra social fue un desastre, no le dio ninguna respuesta”, aseguró la mujer.
No es la primera vez que los vecinos de la Región presentan quejas por el accionar de la obra social de los comerciantes, OSECAC. En este marco, la única respuesta que encuentran es a través del sistema de salud público que debe resolver la falta de atención o de respuesta, de las obras sociales.
