Realizan un acto frente al boliche donde fue asesinado Fernando Báez Sosa

A un año del crimen, se llevó a cabo un homenaje para pedir la prisión perpetua para los asesinos del joven.

Este lunes se cumple un año del crimen de Fernando Báez Sosa, el joven asesinado por un grupo de rugbiers a la salida de un boliche de Villa Gesell. Por ello, un grupo de vecinos se acercó a la puerta del espacio bailable para pedir justicia por la víctima y prisión perpetua para los acusados.

A pocos pasos del boliche Le Brique, vecinos y turistas se concentraron para depositar rosarios, collares de caracoles, flores, fotos y mensajes en memoria del joven en el santuario creado junto un árbol del lugar.

“Perpetua a todos los asesinos”; “Justicia por Fer”, y “Cárcel para los asesinos”, fueron algunos de los mensajes dejados sobre el frente del boliche del que Báez Sosa fue echado junto a sus amigos minutos antes de ser atacado por un grupo de rugbiers.

Sabrina Pereyra, una de las organizadoras de la convocatoria al cumplirse un año del crimen, cuestionó el accionar del personal de seguridad del local, que permanece cerrado desde el verano pasado, y dijo que Fernando “se pudo haber salvado de mil maneras”, si no lo hubieran sacado al mismo tiempo que los rugbiers, con los que había tenido un encontronazo dentro del lugar.

Minutos antes de las 20, marcharon hacia la Parroquia Inmaculada Concepción, donde el obispo de Mar del Plata y expárroco de Gesell, Gabriel Mestre, ofició una misa en memoria del joven estudiante de derecho.