Berni puso en duda el móvil del asesinato del colectivero y advirtió sobre “agitadores del PRO”

El ministro reiteró hoy que "hubo infiltrados" en la protesta de colectiveros.

Berni sobre el asesinato de Andrés Blaquier

El ministro de Seguridad de la provincia de Buenos Aires, Sergio Berni, volvió a poner en duda hoy que el crimen del colectivero Daniel Barrientos en Virrey del Pino se encuadre en un “hecho habitual” de inseguridad y denunció la presencia de “infiltrados” y de “agitadores del PRO” en la manifestación de choferes de ayer, en la que fue agredido.

En declaraciones a las radios 10 y La Red, Berni reiteró hoy que “hubo infiltrados” en la protesta de colectiveros, realizada en Avenida General Paz y Juan Manuel de Rosas, en repudio al asesinato de Barrientos.

“No puede ser que la única metodología sea agitar. Ayer había agitadores del PRO que los tenemos recontra conocidos. Había infiltrados del PRO y Patricia Bullrich es parte de ese sector. Que se hagan responsables. Cuando llegué al lugar había actores que ya los conozco”, aseguró por Radio 10.

De hecho, la justicia federal recibió hoy una denuncia penal para que se investigue el ataque contra Berni, presentada por la abogada Valeria Carreras, quien sospecha que las agresiones no fueron parte de “un accionar espontáneo, ni nacido del dolor de haber perdido un compañero de trabajo en un hecho de inseguridad”, sino que obedecen “a un plan de acción sincronizado”.

La denuncia quedó radicada por sorteo en el juzgado federal 9 que subroga la jueza María Eugenia Capuchetti, tendrá como fiscal a Guillermo Marijuan y está apuntada “contra las personas que participaron de los hechos violentísimos, perpetrados contra el Ministro de Seguridad de la Provincia”, según surge del escrito al que accedió Télam.

También presentó una denuncia, pero en la justicia nacional, el ministro de Justicia y Derechos Humanos bonaerense, Julio Alak, para que se investiguen los delitos de “atentado contra la autoridad, lesiones graves e intimidación pública”, ya que considera que exceden la jurisdicción de la justicia contravencional porteña.

Berni fue agredido con golpes de puño y pedradas durante la protesta de choferes en La Matanza por el crimen que, además, motivó un paro de actividades de la UTA y dejó sin transporte público de pasajeros a amplias zonas del conurbano.

El asesinato del colectivero fue cometido el lunes a la madrugada en la localidad de Virrey del Pino (La Matanza), donde su vehículo fue abordado por dos delincuentes, uno de los cuales le disparó en el pecho, de acuerdo con las primeras versiones difundidas por la Policía y avaladas por testigos.

“No fue lo habitual, no quiero naturalizar. Por lo general los delitos tienen patrones que coinciden. Cambian los actores pero los patrones son siempre los mismos”, explicó Berni el lunes en declaraciones al canal América Noticias.

Insistió con que no es lo habitual “que crucen un auto a las 4 de la mañana, a un colectivo que no tiene plata”, aunque se excusó de dar más precisiones para no entorpecer la investigación.

El ministro remarcó que el arma utilizada para perpetrar el crimen fue una pistola calibre 40, con municiones Smith&Wesson y señaló que se trata de un arma “típica de sicario” y no “el arma de los delitos amateur del conurbano”.

No sé si nos tiraron un muerto“, analizó Berni al responder una pregunta en ese sentido, durante la entrevista con AN, en tanto hoy cuestionó al fiscal de la causa, Gastón Duplaá, y recordó que el Gobierno bonaerense destinó presupuesto para la colocación de cámaras en los colectivos, pero las empresas no realizaron la inversión.

De hecho, el ministro de Transporte bonaerense, Jorge D’Onofrio, confirmó hoy que existe “un incumplimiento por parte de las empresas” de colectivos y aseguró que la administración provincial invirtió 2.500 millones de pesos en cámaras de video que no están funcionando.

En otro tramo de la entrevista, y con relación a la agresión que sufrió (fractura de maxilar superior y traumatismo de cráneo), Berni atribuyó el hecho a “la congoja de los compañeros que se mezcla con internas sindicales, que son notorias y públicas, por plata”.

“Uno de estos intereses en disputa es la política, sabemos que están todos los activistas políticos en un año electoral. Siempre hay infiltrados, vi caras conocidas, en este ambiente nos conocemos todos”, aseguró.

Desde el Gobierno nacional, la portavoz de la Presidencia, Gabriela Cerruti, se pronunció sobre el dolor que provoca en la Casa Rosada “cada una de las muertes por inseguridad“, durante una conferencia de prensa ofrecida exclusivamente a medios populares.

La portavoz destacó que la “responsabilidad” del Gobierno nacional es la de “apoyar, acompañar y coordinar” con las autoridades locales los esfuerzos para enfrentar la problemática de la inseguridad, pero subrayó que la “responsabilidad por la seguridad de la Ciudad de Buenos Aires es de (Horacio) Rodríguez Larreta, la de la provincia es de (Axel) Kicillof, y la de Santa Fe es de (Omar) Perotti”.

“Una causa central de la violencia y de la inseguridad son la injusticia y la desigualdad. No es porque hay más pobreza que va a haber más inseguridad, es donde hay más desigualdad que hay más inseguridad. El Gobierno tiene la obligación de llevar adelante dos políticas: luchar por la igualdad, por la distribución del ingreso, por una sociedad más segura es una sociedad más igualitaria. Y, al mismo tiempo hay que tomar medidas concretas”, afirmó.

Por su parte, el ministro de Seguridad de la Nación, Aníbal Fernández, condenó la violencia sufrida por Berni, consideró que “de ninguna manera se puede permitir tal agresión” y juzgó “llamativo” el accionar exhibido por la Policía de la Ciudad durante la protesta.

“La forma en la cual un efectivo le pegó a un chofer es algo que no se puede entender. Le pega con el borde del escudo, que es de un acrílico duro. Lo pudo haber matado. La Policía no se puede vengar porque son profesionales”, observó Fernández en diálogo con Radio 10.

Por el contrario, el jefe de Gobierno porteño, Horacio Rodríguez Larreta, elogió la actuación de la Policía de la Ciudad y dijo que esa fuerza “salvó” a Berni del ataque durante la protesta.

“Terminamos con ocho policías en el hospital y se evitó y frenó una situación de mucha violencia”, dijo Larreta durante una actividad de gestión.