Diego Armando Maradona murió el 25 de noviembre y una multitud lo despidió ayer en la Casa Rosada. Sus restos mortales descansan en un cementerio privado de San Miguel, donde se implementó un fuerte operativo de seguridad para evitar el ingreso de hinchas.
Unos 200 policías bonaerenses vigilan desde anoche las inmediaciones del cementerio Jardín Bella Vista, donde desde ayer descansan los restos de Diego Armando Maradona. La medida fue ordenada por el Ministerio de Seguridad de la provincia De Buenos Aires y se implementará, en principio, durante una semana para evitar cualquier incidente.
Los voceros detallaron a Télam que la vigilancia permanecerá durante las 24 horas en los accesos y el perímetro del cementerio, situado en calle Mayor Irusta 5631, de Bella Vista, donde se colocaron vallas.
Los restos de Diego Maradona fueron sepultados ayer a las 19 en una ceremonia intima, junto a las tumbas de sus padres, Dalma Franco, “Doña Tota”, fallecida en 2011, y Don Diego Maradona, quien murió en 2015.
Desde el municipio de San Miguel informaron a la comunidad que en los próximos días se arbitrarán las medidas necesarias para que pueda visitarse el lugar donde descansan sus restos. “Junto con el cementerio, está previsto organizar visitas con turnos programados, respetando el orden y los cuidados que correspondan”, informaron ayer.
El día después de la despedida todo es silencio. Los argentinos que ayer se acercaron a Casa Rosada retomaron la vida normal, se cumple el tercer día de duelo decretado y el llanto atragantado pide pista ante cada comentario, video o imagen de la vida del más grande o de su despedida. Los homenajes se multiplican y las palabras de aliento también. “Gracias”, se lo dijo toda la Argentina.
