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Una buena persona es uno de los últimos estrenos de Prime Video, y cuenta la historia de Allison (Florence Pugh), quien tras provocar involuntariamente un accidente de tránsito en el que muere la hermana de su prometido, y su esposo, lucha por recuperar su vida de la depresión y la adicción, con la inesperada ayuda de Daniel (Morgan Freeman), su suegro.
“Los entusiastas de los trenes en miniaturas, somos señores en un mundo donde los vecinos siempre son amables, los amantes siempre terminan juntos, y los trenes siempre te llevan a los lugares lejanos a los que siempre quisiste ir. En la vida, por supuesto, nada es tan limpio y ordenado.” Esta es la reflexión que hace Daniel, el personaje que interpreta Morgan Freeman, y que da inicio y también final, a la película escrita y dirigida por Zach Braff, y distribuida por Metro-Goldwyn-Mayer.
La vida de Allison parece alcanzar la perfección, o eso intentan mostrarle al espectador, los primeros planos de esta película. Allison y Nathan (Chinaza Uche) festejan en su hermosa casa, la decisión de unirse en sagrado matrimonio. Todos sus amigos y familia están ahí, acompañándolos y festejando junto a ellos, mientras la pareja recrea la misma escena de su primera cita: ella toca una canción en el piano para él.
Al otro día, dispuestos a poner manos a la obra con todos los preparativos que el casamiento conlleva, Allison va en el auto con su cuñada y el marido, a elegir vestidos, y luego al teatro. Entre los tres se conocen poco pero se llevan fenomenal, y la base de ese vínculo radica en las palabras de su cuñada: “Nunca he visto a Nathan tan feliz”. Motivo suficiente para que Molly le abra las puertas de la familia a la futura esposa de su hermano. Allison maneja y todo es risas, hasta que se distrae viendo el mapa en el celular, pierde el control del auto, y en cuestión de segundos, un accidente catastrófico acaba con la vida de sus dos acompañantes.
Todos sus sueños y planes, incluido el casamiento con Nathan, se derrumban en un abrir y cerrar de ojos. Allison regresa a la casa de su madre en Nueva Jersey mientras lucha con la depresión, la ansiedad, y una adicción extrema a los medicamentos recetados (Oxycontin), sin imaginar que el camino hacia la redención puede ser más difícil de lo esperado. Unidos por la tragedia, las vidas de Allison y Daniel, el padre de su ex-prometido y su cuñada, fallecida en el accidente, convergen de manera completamente inesperada, convergen de forma inesperada en una unión inevitable de dos almas rotas por la culpa y el dolor, que buscan el perdón.
En tiempos donde la vasta oferta de las plataformas torna difícil encontrar productos que valgan la pena, da gusto encontrarse con contenido de calidad como lo es Una buena persona. Se trata de una película que reivindica el género dramático con una historia profundamente humana y dolorosa, que no se regodea en el drama por el drama, creando un dominó de eventos inverosímiles cuyo único objetivo es hacer llorar al espectador: no. La película de Zach Braff explora las miserias más sinceras del ser con una altura admirable.
Una buena persona es una historia pequeña, de una familia que enfrenta una tragedia, en la que cada miembro se las rebusca como puede para sobrevivir. Las soberbias actuaciones de una Florence Pugh que reafirma en cada nuevo film ser una de las mejores actrices contemporáneas, y un Morgan Freeman que a sus 85 años nos entrega una masterclass de actuación, componen dos personajes realmente hermosos, con matices, profundos, que pueden hacer sentir identificado a cualquier persona que haya sufrido alguna vez.
Zach Braff aborda temáticas delicadas como lo son la ansiedad, la depresión y la adicción, con un cuidado y una humanidad que se agradecen. Su película retrata a dos personas que han utilizado el alcohol y las drogas para llenar vacíos y tapar heridas, para adormecer el cuerpo y la cabeza, y por lo menos por un rato, hacerse más leve la tarea de soportar la culpa y el dolor a los que a veces puede enfrentarnos la vida. Además, hace una lectura interesante del duelo por la pérdida de un ser querido, en la que podemos contemplar varios personajes actuando de maneras distintas frente a esto, buscando respuestas en distintos lugares y teniendo necesidades, a veces contrarias, para proveerse algo de alivio.
Sin duda alguna Una buena persona es una pieza audiovisual excelente que vale la pena ver, con la importante advertencia de tener cerca algo para secarse las lágrimas a la hora de darle play.
Ficha Técnica de Una Buena Persona
Título original: A goog person
Año: 2023
Duración: 129 minutos
Género: Drama
Director: Zach Braff
Reparto: Florence Pugh, Morgan Freeman, Celeste O’Connor, Chinaza Uche.
Dónde ver: Primer Video
