El Servicio Penitenciario implementó un programa para aprender a cuidar mascotas

Somos Manada busca que las personas privadas de la libertad puedan desempeñarse en oficios relacionados al manejo de mascotas que son actividades en crecimiento que permiten el autoempleo.

Un proyecto del Servicio Penitenciario Bonaerense denominado Somos Manada apunta a la recuperación de perros provenientes de zonas urbanizadas linderas con las unidades carcelarias con un enfoque terapéutico para favorecer la reinserción social de las personas en contexto de encierro.

Este proyecto cuenta con un antecedente en la Unidad 40 de Lomas de Zamora, donde, desde 2018, se dispuso un espacio de atención veterinaria en el que se realizan castraciones para controlar la población canina del establecimiento.

En tanto en la Unidad 58 las castraciones se realizaron mediante el traslado particular de los perros al centro de Zoonosis municipal mientras que los cuidados pre y post quirúrgicos de estos estuvieron a cargo de un grupo de internos capacitados para esa tarea.

Somos manada apunta no solo a la reparación de acciones pasadas, sino, también, a la resignificación de las potencialidades propias, la disminución de la ansiedad y agresividad provocadas por el contexto de encierro, el logro de una autoimagen más integrada y positiva, la adquisición de hábitos y rutinas, el aumento de la confianza en el trabajo individual y colectivo, y la reinserción social a través del aprendizaje de oficios.

El curso para cuidar mascotas

El curso de introducción a los oficios relacionados al manejo de mascotas que se propone en la Unidad 58 comprende un plan de estudios de cuatro módulos, dictados en igual número de clases de dos horas y media de duración cada una.

Además, cuentan con clases optativas de profundización del contenido temático con evaluación y entrega de certificado, para quienes sumen una carga horaria total de 16 horas

Los ejes temáticos abordan en una primera instancia el manejo y aproximación a las mascotas para ganar su confianza, uso de correas, bozales, nociones de paseo y comportamiento animal.

Luego se abocan al paseo y entrenamiento con introducción a la etología animal, reflejo condicionado y trato con propietarios.

Asimismo, aprenden nociones de medicina veterinaria referidas a la curación de heridas, aplicación de inyectables, inmovilización, antibióticos, manejo del paciente enfermo, sutura básica, hidratación y alimentación.

Finalmente, se les brinda capacitación en peluquería: manejo en bañaderos, uso de máquinas cortadoras de cabello, secadoras, cortes sanitarios y sujeción.

El objetivo es que las personas privadas de la libertad puedan desempeñarse en oficios relacionados al manejo de mascotas que son actividades en crecimiento y que permiten el autoempleo.

El curso está a cargo del médico veterinario Daniel A. Barci, y es coordinado por el psicólogo Bernardo Ferri con la agente Claudia Figueroa.