San Albano se prepara para la última jornada de un campeonato que lo tuvo como protagonista en el arranque, pero que con el correr de las fechas fue perdiendo lugar y ya hace rato que se quedó sin chances de ascenso. “Nos faltó regularidad para pelear arriba”, lamentó el ala Agustín Irurzún en diálogo con Info Región.
“Tuvimos un bache en una seguidilla de partidos donde no nos salían las cosas y los malos resultados nos terminaron llevando a donde estamos ahora”, evaluó el forward, quien además comentó que en estas últimas fechas el equipo “se dedicó a jugar a jugar sin presión” y a empezar “a preparar el año que viene”.
Despedida de local
El sábado el equipo de Corimayo se despidió de su gente con una victoria por 48-29 ante San Martín, en un encuentro cambiante y con muchos puntos. El ala consideró que fue un partido abierto y dinámico porque “ninguno de los dos equipos jugaba por algo”.
“Con aciertos y errores pudimos imponer nuestro juego. Era un encuentro muy importante porque era el último de local y uno siempre quiere cerrar el año de la mejor manera posible”, añadió.
Con 58 puntos, los comandados por Nicolás Lualdi marchan en el octavo puesto de la Primera A de la Unión de Rugby de Buenos Aires (URBA) y con un triunfo en la última fecha podrían llegar a escalar dos posiciones y en caso de perder, podrían caer un puesto.
Último rival
En su despedida del torneo, Albano se medirá ante Champagnat, equipo que fue animador del campeonato y que se quedó sobre el final sin chances de pelear por un ascenso. Con 75 puntos marchan cuartos, lugar del que no se moverá más allá del resultado.
“Vamos a enfrentar a un equipo duro, que estuvo durante todo el año entre los primeros puestos, por lo cual será un partido complicado. Al ser la última fecha, los dos vamos a salir a ganar para poder terminar el año con una victoria”, concluyó Irurzun.
