Las dificultades electorales de las listas nacionales suelen disparar la intención de los intendentes de descolgarse de la papeleta grande y hacer campaña en los distritos con la denominada “boleta corta” que sólo incluye a los candidatos locales. Sin embargo, ese llamado al corte de boleta nunca fue tan explícito como en Esteban Echeverría, donde la cartelería de campaña directamente exhibe una tijera y llama a cortar boleta.
Los carteles pudieron verse en el centro de Monte Grande, e incluso algunos fueron vandalizados, presumiblemente en desacuerdo con la invitación a no votar a Victoria Tolosa Paz y Mariano Cascallares, que son los candidatos que encabezan la lista del Frente de Todos a nivel provincial y en la Tercera Sección Electoral.
Se trata de un intento explícito de despegar la suerte de la lista de candidatos a concejales de la que lleva a postulantes a la Cámara de Diputados de la Nación y a la Legislatura provincial.
Si bien el corte de boleta es una estrategia electoral habitual según cómo les vaya a los candidatos locales respectos de los nacionales -como ocurrió en Lanús en 2019 cuando desde el PRO impulsaron a separación de las categorías en las papeleta-, habitualmente esas acciones, que incluyen la distribución de boletas cortadas, se suelen hacer informalmente, sin que resulte explícito que el partido a nivel local repudia a los candidatos provinciales o nacionales.
Sin embargo, en el distrito de Fernando Gray el material de campaña oficial ya invita a cortar boleta con afiches que sólo cambian de color y tomaron la precaución de retirar al jefe comunal de las imágenes, pero abiertamente proponen votar exclusivamente a los candidatos locales, desentendiéndose de la suerte del resto de la oferta elctoral.
