San Vicente tiene 45 casos confirmados de coronavirus y es uno de los distritos más afectados en la Región. Por eso fue uno de los elegidos por el gobierno bonaerense para el comienzo de la implementación del plan de relevamiento puerta a puerta, que tiene como objetivo la detección temprana de síntomas para atacar focos de posibles contagios de Covid-19 en los barrios.
En este operativo trabajan promotores de salud, junto a enfermeros y profesionales de distintas instancias del gobierno provincial y el plan está dirigido a una población con menores posibilidades de acceso al sistema de salud.
A los vecinos se le toma de la temperatura corporal y ante la detección de un caso sospechoso, se hace el hisopado correspondiente y se le entrega un barbijo para poder ser trasladado al hospital donde es internado a la espera del resultado.
El primer operativo de San Vicente se realizó la semana pasada en el Barrio Sargento Cabral y Los Vecinos, en un trabajo conjunto entre los Ministerios de Salud de la Nación, la Provincia de Buenos Aires, de Desarrollo de la Comunidad y el municipio. Se detectó un caso positivo. “Encontramos un febril y lo transportamos con un móvil ambulancia rápidamente hacia el hospital para tomar los recaudos del caso”, precisó el coordinador general del Comité de Covid-19 en el distrito, Alejandro Berelli, en diálogo con Info Región.
Mientras que este lunes se efectuó el segundo operativo en el centro de Alejandro Korn. “No encontramos ningún febril en todo el relevamiento, pero sí encontramos personas con dificultades motrices y los vacunamos en sus casas. También vacunamos a niños”, señaló Belleri.
Además de casas, estuvieron presentes en comercios y en el transporte público. “Hubo dos aprehendidos por incumplimiento de cuarentena en el operativo de Korn porque Seguridad también acompaña con todo el control”, resaltó.
El coordinador general adelantó que los operativos se realizarán dos o tres por veces por semana. “Los vamos a ir diseñando para barrios vulnerables aunque trataremos de abordar todos los barrios que se pueda”, aseguró.
Añadió que si bien el “eje central” está puesto en los controles febriles, el personal se encarga de abordar la problemática de una manera más integral. “Fiscalizamos temperatura, vemos vacunación, también problemáticas respecto a recetas. También viene un psiquiatra con nosotros y vemos la posibilidad de evaluar alguna situación de violencia doméstica.Tratamos de aprovechar los operativos para captar todo lo que se pueda que esté relacionado directa o indirectamente con la salud”, enfatizó.
