La Asociación Sindical de Profesionales de le Salud de le Provincia de Buenos Aires (CICOP) resolvió el llamado al Congreso de Delegados para el 17 de julio de manera virtual, dado que el gobierno provincial continúa sin convocarlos a discutir salarios. La reapertura de paritarias debía ser el mes pasado. Advierten que sin buenos sueldos, no se podrá dotar al sistema de salud de profesionales para fortalecerlo.
“Firmar acuerdos para incumplirlos y negarle al personal de Salud su derecho básico a percibir un sueldo adecuado en el medio de una pandemia son decisiones que contradicen las declaraciones de lxs funcionarixs en relación al rol fundamental de la Salud Pública en la emergencia sanitaria”. “Por ello, insistiremos en demandar el reinicio de las negociaciones para abordar una problemática que debiera comenzar a observar visos de resolución, en tanto a ello se han comprometido las autoridades”, señala el comunicado difundido el pasado lunes.
La presidenta del gremio, Marta Márquez, advirtió en diálogo con Info Región sobre la terrible situación que se encuentran atravesando los diferentes profesionales. “Deberíamos haber sido convocados, convocadas a paritarias en junio. Cerramos una paritaria en disconformidad en abril y taxativamente en el acuerdo que firmamos decía que en junio nos íbamos a estar reuniendo de nuevo para discutir salario y condiciones de trabajo porque nuestros salarios están muy retrasados en relación a lo que se debería ganar, en cualquier circunstancia y mucho más en el medio de una pandemia con las situaciones de riego que se enfrentan a diario”, comentó.
Tal como lo expuso la asociación en su reclamo, con salarios iniciales de 46000 pesos se encuentran “muy por debajo de las cifras que fija como referencia la canasta básica que elabora la junta interna de ATE-INDEC”. Y esto trajo como resultado que, ante una convocatoria abierta para ingresar a los hospitales provinciales, “las respuestas de lxs profesionales fuera escasa, consiguiendo apenas unos 650 sobre un total de 2500 cargos necesarios”.
El ingresante “cobra en mano 46 mil pesos por 36 horas de trabajo semanal y claramente no es un salario que sea atractivo para que alguien decida ingresar”. Es debido a esto que hay “tan poca oferta” porque tampoco es “atractivo” ingresar a trabajar en un momento como este “en situación de riesgo”. “A ello se le agrega una pirámide achatada, donde quienes llevan muchos años desempeñando su labor o han accedido por concurso a jefaturas de servicios y de salas, tampoco perciben ingresos que se condigan con la responsabilidad de la tarea que realizan”, amplía el comunicado.
Por esto Márquez remarcó que para “fortalecer el sistema público está muy bien haber sumado más camas y haber ampliado infraestructuras”, pero sin “personal suficiente para atender y que cobre buenos salarios es hacer las cosas a medias”. “Esta es una oportunidad para fortalecer el sistema público de salud que viene con problemas estructurales desde hace muchos años y no hay forma de fortalecerlo sin la cantidad necesaria de trabajadores, trabajadoras y profesionales”, apuntó.
En esta línea, hizo hincapié en que resulta “imprescindible poner dinero e invertir en la salud pública si queremos afrontar de la mejor manera esta situación”. “En un tiempo de enormes dificultades, lxs trabajadorxs de la Salud demostramos todos los días que estamos a la altura de las circunstancias que nos han tocado. Lo mismo reclamamos de quienes nos gobiernan, responsables de dar las respuestas que la hora requiere”, concluye el reclamo del gremio.
