En medio de la invasión de la Federación Rusa a Ucrania, la Unión Europea discute en su parlamento la Ley de Mercados Digitales (DMA, por sus siglas en inglés), con la que pretende regular a los gigantes informáticos Google, Amazon, Meta y Microsoft.
Una de las herramientas que considera el congreso del viejo continente es la interoperabilidad entre servicios de mensajería, en otras palabras: que un usuario pueda enviar un mensaje en WhatsApp y que éste pueda ser recibido por otra persona que usa Telegram o Signal, por ejemplo.
De aplicarse esta iniciativa implicaría un cambio radical de paradigma que obligaría a estos gigantes a implementar protocolos abiertos y que dejen de excluirse mutuamente para conformar un estándar, tal como sucedió con los SMS y los correos electrónicos, o con la constitución del estándar Matter para el Internet de las Cosas (IoT).
El desafío y el cambio de modelo
El proyecto indica que los usuarios deberán poder enviar mensajes, imágenes, vídeos y hacer llamadas entre las aplicaciones de distintas empresas que también se podrían integrar los chats grupales, aunque se otorga un plazo de hasta tres años para desarrollar los protocolos de intercambio de cifrados que permitan hacerlo.
Si estas normas se aprueban y las empresas no cumplen, la Unión Europea podría imponer multas de hasta el décimo del volumen de negocios mundial total en el ejercicio anterior, una sanción que se duplica en caso de reincidencias, así como no podrían sumar activos tecnológicos.
Pendiente de su aprobación en Europa, resta definir cómo impactaría esta norma entre los usuarios de otros continentes.
