La Familia Real confirmó que el nuevo monarca británico será conocido como el rey Carlos III, tras la muerte de la reina Isabel II. En su primera comunicación pública, el nuevo rey de Gran Bretaña e Irlanda del Norte, entre otros títulos, describió la muerte de su madre, la reina Isabel, como un momento de “máxima tristeza” tal como refleja el comunicado emitido por el Palacio de Buckingham,.
La tarea del nuevo rey llega tras décadas como Príncipe de Gales, el título del heredero de la corona y deberá reemplazar a una reina popular y respetada, pero con una familia real que tuvo muchas intevenciones, al menos, polémicas.
Nacido como Carlos Felipe Arturo Jorge Mountbatten – Windsor hace 73 años se enfrentará a esos retos a lo que suma ser el monarca de mayor edad en ocupar el trono en un linaje que se remonta a 1.000 años, acompañado con su segunda esposa Camilla Parker, duquesa de Cornuailles, que aún divide a la opinión pública.
Para los detractores, el nuevo rey es débil, vanidoso, entrometido, mal preparado para el papel de soberano y lo ridiculizan por hablar con las plantas y obsesionarse con la arquitectura y el medio ambiente.
Además, habrá que ver como pesa la sombra de su fallido primer matrimonio con la difunta princesa Diana.
Sus partidarios, en cambio, alegan que eso es una distorsión del buen trabajo que hace, que simplemente se le malinterpreta y que en áreas como el cambio climático se ha adelantado a su tiempo.
Afirman que es reflexivo y se preocupa por sus conciudadanos británicos de todas las comunidades y condiciones sociales. Su organización benéfica Prince’s Trust ha ayudado a más de un millón de jóvenes desempleados y desfavorecidos desde su lanzamiento hace casi medio siglo.
“El problema es que estás en una situación en la que no puede ganar nada. Si no haces nada en absoluto (…) se van a quejar”, dijo una vez Carlos en un documental de televisión. “Si intentas implicarte, hacer algo para ayudar, también se quejan”.
A lo largo de su vida, Carlos estuvo atrapado entre una monarquía en proceso de modernización, que intenta encontrar su lugar en una sociedad más igualitaria y en rápida evolución, y el mantenimiento de las tradiciones que dan a la institución su encanto.
Ahora habrá que ver si será conservador de tradiciones que se extinguen, un mero monarca de transición como su tatarabuelo Eduardo VII o el que siente las bases de una transformación de la monarquía.
Los otros Carlos
El primer Carlos fue ejecutado en 1649 tras la Guerra Civil Inglesa que abolió la monarquía y convirtió a Inglaterra en una república bajo la tiranía del Lord Protector Oliver Cromwell tras cuya muerte, en 1660, se restauró la corona bajo Carlos II.
A diferencia de su padre, Carlos II fue un hábil político que favoreció el desarrollo de los partidos liberal y conservador, favoreció las artes y las ciencias y, un antipuritano activo que mandó a abrir los teatros cerrados por Cromwell.
En su lecho de muerte, Carlos regresó al catolicismo de los Estuardo, una sospecha que siempre pesó sobre el heredero que, al fin, será coronado.
