Se juntaban a jugar al fútbol, pero con la pandemia se pusieron la camiseta de la solidaridad

La cuarentena les impidió seguir con la actividad deportiva pero decidieron apadrinar un comedor de Burzaco al que asisten 150 chicos y chicas.

La pandemia cambió la realidad de todos y en aquellos que menos necesidades tienen, se despertó el costado más solidario. Es el caso de un grupo de amigos que se juntaban una vez por semana a jugar al fútbol en Adrogué. Frente a la cuarentena, y la imposibilidad de continuar con esta actividad, decidieron dedicar ese tiempo en ayudar a los demás. Hoy, apadrinan un comedor de Burzaco, pero la historia no comenzó allí.

Damián, uno de esos 15 hombres que se juntaban todas las semanas a disputar un picadito, contó a Info Región que todo comenzó con la llegada de la pandemia al país y la imposibilidad de continuar con las rutinas habituales. Decidieron usar el nombre “Mainichi Solidario”, en honor a las canchitas donde se juntaban a jugar al fútbol. Emprendieron entonces, con la camiseta de la solidaridad puesta, el camino de la ayuda.

Se contactaron con el club San Martín de Burzaco para colaborar con las ollas populares que se realizaban. “Luego de unas semanas, la Municipalidad colocó camas en el club, con el fin de prepararlo para el pico de contagios y se suspendieron las ollas populares. Pero nosotros quisimos seguir ayudando y por intermedio de otro chico, dimos con el comedor ´Felices los niños´”, explicó.

Así, este grupo de amigos tomó la decisión de apadrinar al comedor, ubicado en Miguel Diomede al 2074 de Burzaco, al que asisten 150 chicos y chicas. “Es una sensación muy gratificante ayudar a otros, la vida es una rueda y uno nunca sabe si el día de mañana seremos nosotros a quienes nos toque pedir ayuda. Esto lo hacemos de corazón, porque sabemos que mucha gente la está pasando mal”, aseguró, dejando notar su emoción.

Cabe aclarar que toman todos los recaudos necesarios para ayudar. Utilizan barbijo, alcohol en gel, rotan actividades y nunca hay más de tres personas a la hora de cocinas.

Damián anticipó que en los próximos días organizarán una rifa para poder comprar un horno pizzero y un cucharón industrial, para donar al comedor. Además, recolectan donaciones para poder seguir alimentando a los niños que asisten. Quienes puedan y quieran colaborar, pueden contactarse con él (1557005430) y dar una mano en tiempos de emergencia sanitaria y social.