Preocupación en la Provincia por la circulación de las nuevas cepas

"La realidad de la primera ola ha cambiado muchísimo con la entrada de estas nuevas variantes, que son mucho más contagiosas".

El ministro de Salud de la provincia de Buenos Aires, Daniel Gollan, manifestó este martes su preocupación por la confirmación de casos de nuevas cepas, que en algunos casos ya son de transmisión comunitaria. La que más alarma es la variante sudafricana porque no hay certezas sobre la eficiencia de las vacunas.

De acuerdo al último informe de Proyecto PAIS, que monitorea las nuevas cepas, hay en el Área Metropolitana de Buenos Aires (AMBA) “circulación extendida” de las variantes Manaos y del Reino Unido, remarcó el funcionario, al tiempo que admitió la preocupación por la circulación de otras dos en el país. “La noticia que recibimos ayer es que ya se han detectado algunos casos de la sudafricana y la variante india“, dijo.

“Cuando hablamos de medidas de cuidado, tenemos en cuenta todas estas cosas. La realidad de la primera ola ha cambiado muchísimo con la entrada de estas nuevas variantes, que son mucho mas contagiosas”, explicó Gollan, quien también admitió que la mirada está puesta en la variante sudafricana, de las más contagiosas. “Hay hay dudas respecto a la eficacia de las diferentes vacunas que hay en el mundo”, admitió.

Pacientes cada vez más jóvenes, incluso niños

“Seguimos viendo una importante cantidad de personas que se internan y permanecen muchos días internadas, entre 20 y 25 días”, señaló el ministro, e insistió con que “las personas que egresan es por fallecimiento mucho más que por recuperación”. “Los directores de hospitales nos dicen que tienen tres o cuatro camas más, nos dicen que es por fallecimiento, no porque pudieron mejorar su situación”, apuntó.

Por otro lado, remarcó que “en general, gente mucho más joven, algunos con comorbilidades pero también sin, están enfermos y graves”. “La nueva evidencia a nivel mundial sigue constatando un descenso importante de la edad de aquellos grupos poblacionales que se enferman: niños y adolescentes ya llegan al 22 por ciento y era del 3 el año pasado”, precisó. Explicó que “la tasa de mortalidad es baja pero aumenta el 50% respecto al numero del año pasado” porque “pasaron del 0,2 al 0,3”. “Esto es un aumento importantísimo de la cantidad de chicos enfermos con coronavirus”, apuntó.

Respecto a la ocupación de camas en Unidades de Terapia Intensiva (UTI), detalló que es del 72 por ciento en el AMBA, algo que “no es para estar tranquilos porque algunos lugares están por encima del 90 por ciento”. De todos modos, valoró que a partir de las medidas de restricción para reducir la circulación, “dejó de crecer (la curva) y bajó, pero en forma muy ínfima”. Insistió en que cada 10 personas personas que se internan, casi siete fallecen.

Vacunación

Ante el reclamo de algunos sectores, como choferes de colectivos o empleados de comercio, para ser vacunados porque “sienten que están más expuestos al contacto con la enfermedad”, el ministro aclaró que aquellos mayores de 40 años con comorbilidades ya pueden anotarse para recibir la vacuna. “A los sectores que reclaman, les pedimos que empiecen a anotarse, ya estamos empezando a vacunar en el segundo hito a ese grupo poblacional que tiene mayor riesgo”, dijo. Pueden anotarse todos aquellos con problemas cardiovasculares, con sobrepeso, diabetes y EPOC, entre otros.

Anunció, asimismo, que a partir del 21 llegan las vacunas AstraZeneca y unas 300 mil le tocan a la provincia de Buenos Aires. Se comenzará a dar la segunda dosis de Covishield. “Hoy o mañana recibiremos las dosis de Sputnik V que llegaron anteayer, y entre el miércoles y jueves ya llegará el avión nuevo y tendremos más vacunas. La vacunación sigue a un ritmo muy bueno”, mencionó.

“Argentina está en un lugar bastante privilegiado respecto a la gente que se ha vacunado, estamos en un 17 por ciento, muy por arriba de la media mundial que es del 8”, destacó, y bregó por “terminar con la campaña permanente de que acá no se vacuna o se vacuna poco”. “Se ha escuchado que no se ha vacunado a todo el personal de salud, cuando se ha vacunado casi al 96 por ciento. Hay gente que no se anotó o que ahora se está anotando. Si no fuera así, se nos estaría cayendo de forma estrepitosa la planta de trabajadores que está en los hospitales”, completó.