El presidente Alberto Fernández aprovechó su visita a Los Ángeles para la Cumbre de las Américas con sostener una rueda de prensa en la que definió al extitular de Desarrollo Productivo, Matías Kulfas, como “un gran ministro que cometió un error” y reveló que en su conversación a solas con el mandatario de Brasil, Jair Bolsonaro, hablaron “un ratito de fútbol” y de cómo “trabajar en la integración energética”.
“No soporto que en off se hable mal de otro. Es más, yo reniego de los que hablan en off. Es mejor hablar francamente”, dijo el mandatario sobre Kulfas.
Sobre la polémica entre los empresarios por el impuesto a la renta inesperada, el jefe de Estado explicó: “El proyecto de la renta inesperada ya lo teníamos preparado con Martín (Guzmán) desde el día en que anunciamos los bonos para los sectores más postergados y los bonos para los jubilados.”
“La decisión de elevar el proyecto al Congreso era una decisión que yo ya había tomado, en sintonía con lo que pasa en otros lados del mundo. Y el Congreso verá como trata este proyecto”, añadió.
En relación a la caída de los bonos argentinos y la disparada del riesgo país, reconoció que se atraviesa un momento “tormentoso” y, pese a que descartó que la situación pueda empeorar, advirtió: “Hemos decidimos estar cerca del tema para monitorearlo, para intervenir si es necesario”,.
Con respecto a su intervención como presidente pro tempore de la CELAC en la que cuestionó la ausencia de Cuba, Nicaragua y Venezuela, sostuvo que los los funcionarios del gobierno de los Estados Unidos conocían el contenido del mensaje: “Ellos sabían lo que quería transmitir en la Cumbre y no hubo ningún tipo de sobresalto porque, en verdad, como dije en mi mensaje, no vine a poner más muros”.
“En la recepción ofrecida por Biden, nos cruzamos unas palabras, pero de ningún modo hubo un reproche, todo lo contrario. Fue muy generoso conmigo”, reconoció.
Acerca del encuentro con el presidente de Brasil, Jair Bolsonaro, recordó: “Me vio en el hall de entrada antes de pasar a la reunión; estábamos haciendo tiempo para pasar a la reunión, y se acercó muy amablemente. Me saludó, hablamos un ratito de fútbol, y después me contó su preocupación por el tema energético, sobre de qué modo podemos trabajar en la integración energética”.
En ese sentido, reveló que le adelantó que si se concluye el gasoducto de Vaca Muerta “va a poder enviar mucho gas a Brasil”.
“Honestamente, es la primera vez que hablo más de dos minutos con el presidente Bolsonaro“, admitió.
