Mientras las miradas están puestas en los datos que el Instituto Nacional de Estadística y Censos (Indec) dará a conocer el 28 de marzo (Índice de Pobreza del segundo semestre de 2018), el Gobierno se mostró dispuesto a dialogar con las organizaciones sociales que encabezan protestas en la calle.
La ministra de Desarrollo Social, Carolina Stanley, afirmó hoy que “la inflación es el peor impuesto a las familias más vulnerables”, y se mostró dispuesta al diálogo con las organizaciones sociales, pero consideró que “a veces la respuesta puede no ser la que uno espera”. Stanley lo expresó tras una semana de marchas y piquetes en reclamo de ayuda a los sectores más carecientes.
De cara a los datos que el Indec dará a conocer, la propia Stanley había admitido que los números serían peores a los de la primera mitad del año. En las últimas horas, aclaró que “décadas de pobreza estructural en la Argentina no se revierten de un día para el otro, ni hay recetas mágicas”.
El Indec precisó que en el primer semestre de 2018, la pobreza fue del 27,3 por ciento. La Universidad Católica Argentina (UCA) señaló que el tercer trimestre arrojó un avance al 33,6 por ciento el índice de pobreza y en 6,1 por ciento el de indigencia. Con 13,6 millones de pobres, se trata de la mayor variación de este índice en el gobierno de Mauricio Macri y de la última década.
