El gobernador de Buenos Aires, Axel Kicillof, aseveró que espera encontrar una solución que permita diferir hasta el primero de mayo el pago de una deuda de los 250 millones de dólares ya que la provincia “tiene voluntad de pago“.
“La Provincia tiene voluntad de pago, pero no puede hacerlo”, afirmó durante una entrevista que publicó este domingo el periódico platense El Día y señaló que el resultado de las negociaciones “se conocerá el último día”, el miércoles de esta semana.
El gobierno provincial anunció el viernes a los tenedores del bono BP21 que extendió hasta las 13 de este lunes el plazo para que puedan otorgar su consentimiento a diferir el vencimiento del pago de capital desde el 26 de enero hasta el 1 de mayo. Kicillof necesita que el 75 por ciento de los bonistas acepten esta propuesta.
Críticas
El mandatario bonaerense advirtió que “la situación es delicada” y volvió a responsabilizar a su antecesora, María Eugenia Vidal, y al ex presidente Mauricio Macri en lo que considera un proceso en el que se tomaron “decisiones gravísimas y de absoluta irresponsabilidad”.
Kicillof reiteró que el perfil de la deuda “es insostenible”, remarcó que en los próximos cuatro años hay vencimientos de 9.000 millones de dólares, “imposibles de pagar”, por lo que estimó que “lo mejor es empezar a buscar una solución cuanto antes”.
Negociación
Sostuvo que la negociación con los bonistas “es compleja” y agregó que “ellos tienen diferentes motivaciones y la Provincia tiene voluntad de pago, pero no puede hacerlo”. “En definitiva, el resultado se conocerá el último día. Pero lo que quiero dejar en claro es que lo que estamos haciendo es no comprometer los recursos para atender las necesidades en salud o educación, por ejemplo”, aseguró.
Subrayó, además, que “la negociación está coordinada con el Gobierno nacional, tal como lo dijo el presidente Alberto Fernández”.
