Golpe de Estado en Bolivia: Evo Morales tendrá asilo político en México

El presidente depuesto será recibido por el mandatario mexicano, López Obrador. Al respecto, Alberto Fernández le mostró su “eterna gratitud”.

El presidente depuesto de Bolivia, Evo Morales, aceptó el asilo político que le ofreció el mandatario de México, Andrés Manuel López Obrador, como consecuencia del golpe de Estado que se lleva a cabo en dicho país.

“Es por razones humanitarias y ante el peligro que corre su vida. Hace unos momentos recibí una llamada del presidente Evo Morales, mediante la cual respondió a nuestra invitación y solicitó verbal y formalmente asilo político en nuestro país”, indicó el Secretario de Relaciones Exteriores de México, Marcelo Luis Ebrard Casaubón.

Al respecto, el presidente electo Alberto Fernández expresó su “eterna gratitud” al mandatario mexicano. “Tengo una enorme gratitud con él, que rápidamente fue en socorro de sus compatriotas de América Latina que están siendo perseguidos. México lo hizo en el ’70 y ahora. Gratitud eterna a ellos”, precisó. 

 “Siempre es bueno poder hablar de elecciones y democracia en estos tiempos en América Latina. En Bolivia se interrumpió la democracia. Esto generó una crisis social que no se sabe dónde va a terminar. Gracias a Dios, existe la solidaridad de presidentes y pueblos que fueron en socorro del agredido, que es Evo Morales“, destacó Fernández.

Por otra parte, el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, avaló el accionar de las fuerzas armadas en tierras bolivianas. “La renuncia de ayer del presidente Morales es un momento significante para la democracia en el hemisferio occidental. Estados Unidos aplaude al ejército boliviano por acatar su juramento de proteger no solo a una persona, sino a la constitución boliviana”, apuntó.

En Argentina, el presidente Mauricio Macri señaló brevemente  previo a ingresar a la Casa Rosada y ante la consulta de la prensa presente: “Todos estamos preocupados”. Sin embargo, el canciller Jorge Faurié minimizó la situación en Bolivia al señalar que “no están los elementos para describir esto como un golpe de Estado” sino que “hay un vacío institucional”.