La Clínica Monte Grande está colapsada: hay camas con respiradores en los pasillos

"Es una sanidad de guerra", admitió el director. Si bien pusieron camas en los pasillos, no alcanzan los recursos humanos.

El duro golpe de la segunda ola de casos de Covid-19 impactó de lleno en los centros de salud, tanto públicos como privados. “Estamos colapsados”, confesó el director de la Clínica Privada Monte Grande, Carlos Santoro, quien además reveló que en promedio el 34 por ciento de los testeos es positivo.

“El fin de semana hubo pacientes graves esperando una cama alrededor de 20 horas promedio. Las derivaciones no vienen a buscarlos”, reveló Santoro acerca de la dramática situación, y precisó que tuvieron que cerrar la guardia durante dos horas para poder acomodarse. “Estamos colapsados. Lo que el año pasado tal vez vimos con exageración, este año nos quedamos cortos“, lamentó.

“Es muy difícil trabajar así. La situación del fin de semana fue cerrar para ver como hacíamos, porque no podíamos tomar pacientes complejos, porque si les pasaba algo no íbamos a poder atenderlos”, planteó, y expresó: “Es muy estresante, porque sabes que a esa gente la mandás a otro lugar y va a ser muy difícil que la ingresen”. “Es una sanidad de guerra“, consideró.

Estamos supernumerarios porque pusimos camas en los pasillos con respiradores. Estamos al 120 por ciento”, reveló, a la vez que apuntó que si bien podrían poner más camas, “no hay recurso humano”. “El personal está agotado, no se le puede demandar más“, consideró acerca de las y los trabajadores de la salud que ponen el cuerpo día a día.

En ese sentido, Santoro indicó que se puso a disposición apoyo psicológico para ellos. También detalló que el 60 por ciento del personal está vacunado, y que si bien hay contagios, son menos de los que hubo el año pasado. Lamentablemente, perdieron a un enfermero en octubre de 2020.

Al respecto de la saturación del sistema y el aumento de casos positivos de coronavirus, el director del hospital advirtió que tienen “dos cuadras de espera permanente” para hisopados y que al 34 por ciento promedio le da positivo. “Es muy alto”, alertó.

En misma línea, manifestó que se presentaron casos correspondientes a las nuevas cepas y que su tasa de mortalidad es mayor. “Notamos que los pacientes de terapia ahora hay pacientes más jóvenes, de entre 40 y 50 años, que hacen fibrilaciones musculares y pulmonares, cosa que antes no pasaba”, apuntó y evaluó “tiene que ver con que son cepas más agresivas que atacan a personas más jóvenes y sin enfermedades de base. Gente sana”.