En el Día de la Tierra, el Presidente pidió canjear “deuda por acción climática”

"Nos miran las nuevas generaciones. El tiempo de la duda se terminó; nadie se salva solo. Transitemos unidos un tiempo distinto con justicia social, financiera y ambiental", insistió el mandatario.

El presidente de la Nación, Alberto Fernández, subrayó hoy que “la crisis ecológica y social son dos caras de la misma moneda” e insistió con la propuesta de una “renovación de la arquitectura financiera internacional” que posibilite un “canje de deuda por acción climática”.

Fernández lanzó estas iniciativas durante se exposición virtual en la Cumbre de Líderes sobre el Clima de la que participó junto a los presidentes y referentes políticos de todo el mundo, una espacio desde el que convocó a coordinar “medidas regionales y solidarias” como el “canje de deuda por acción climática”, una idea que había anunciado ayer en la Cumbre Iberoamericana.

Entre otras acciones reiteró su pedido para que la “asignación de derechos especiales de giro” se haga “sin discriminar a los países de renta media” y solicitó que se reconfiguren “los análisis de las aseguradoras de riesgo para no distorsionar” las realidades de los países emergentes, al tiempo que pidió “mayor flexibilidad de plazos, tasas, y condiciones” para el pago de los compromisos.

“Nos miran las nuevas generaciones. El tiempo de la duda se terminó; nadie se salva solo. Transitemos unidos un tiempo distinto con justicia social, financiera y ambiental”, insistió el mandatario.

Fernández puso de relieve que su administración instaló “la acción climática y ambiental en el centro de sus convicciones” y citó a Juan Perón al afirmar que se debe “tomar conciencia de la marcha suicida que la humanidad ha emprendido a través de la contaminación del medioambiente”.

En ese sentido, destacó que Argentina no sólo honra las metas del Acuerdo de París sino que además postula mayores medidas y esfuerzos que incluyen, por ejemplo “un plan de eficiencia para el transporte, la industria y la construcción” y la tipificación como delito ambiental de las prácticas de “deforestación ilegal”.

La cumbre reunió, en su formato virtual, a 40 mandatarios en el marco del Día Internacional de la Madre Tierra. De los jefes de Estado convocados hay cinco latinoamericanos: Argentina, Brasil, Chile, Colombia y México, mientras que la nómina de expositores se confeccionó en base a las principales economías de los 17 países que más emiten gases de efecto invernadero y los mandatarios más comprometidos con el tema.