Procesaron a Sabag Montiel y Brenda Uliarte por intento de homicidio agravado


La Justicia dictó esta tarde el procesamiento de Fernando Sabag Montiel y Brenda Uliarte, acusados de intentar asesinar a Cristina Fernández de Kirchner y les dictó la prisión preventiva, en el marco de la investigación por el atentado que sufrió la Vicepresidenta en la puerta de su casa el jueves 1 de setiembre.

El delito que le imputó la jueza María Eugenia Capuchetti es el de tentativa de homicidio triplemente agravado por el uso de armas de fuego, alevosía, y concurso premeditado de dos o más personas. Además, les trabó un embargo por 100 millones de pesos a cada uno.

La decisión está en línea con el conjunto de pruebas que trascendieron en los últimos días y que vincula a ambos personajes con las tareas de inteligencia previa, organización y ejecución del fallido atentado.

De ser hallados culpables, la pena que les espera podría superar los 10 años y llegar incluso a los 15 años de reclusión, aunque en el transcurso de la investigación o en posteriores apelaciones podría modificarse la imputación aún si se los considerara culpables.

De acuerdo a la resolución dictada esta tarde, la Justicia entiende que los acusados no concretaron el magnicidio “por razones ajenas a su voluntad”, y consigna que “el modo en que se ejecutó la maniobra investigada refleja la existencia de una cogobernabilidad del hecho por parte de ambos imputados, en tanto la determinación del modo, tiempo y lugar de su ejecución estaba previamente establecida por ellos”.

“Si bien fue Sabag Montiel quien utilizó el arma de fuego contra la víctima, lo cierto es que Uliarte también tuvo activa participación en la ejecución del hecho, en el cual estaba presente a escasos metros de lo ocurrido, brindando el apoyo logístico y moral para su realización”, se explaya la magistrada en el auto de procesamiento.

En cuanto a los otros detenidos: Agustina Díaz, amiga de Uliarte, y Gabriel Nicolás Carrizo, dueño de la máquina para fabricar el algodón de azúcar que vendían algunos de los implicados, la jueza no tomó aún ninguna decisión procesal, por lo que continúan detenidos a la espera de resolver si continúan vinculados a la causa y bajo qué imputación.