Un caso fatal de estreptoco pyogenes es de Avellaneda, pero descartan una epidemia

Desde la Secretaría de Salud de Avellaneda advirtieron que "hubo casos de una gravedad poco habitual, pero son aislados". Son seis los muertos.

La preocupación de padres, médicos y autoridades  no cede. La bacteria Estreptoco Pyogenes ya se cobró la vida de seis personas, entre ellas, un menor de Avellaneda. Desde el Municipio, en tanto, llaman a la tranquilidad y advierten que si bien la bacteria presenta  una virulencia mayor, los casos de gravedad son “aislados” y no se trata de una epidemia.

El 12 de este mes se conocieron dos casos mortales de infección por estreptococo pyogenes: dos nenas de Rosario y Posada. Antes, se había difundido los decesos de dos niños en el Hospital Elizalde de Capital Federal: uno de esos casos es un menor que residía en Avellaneda. A fines de la semana pasada, en tanto, se sumaron otros dos casos fatales: un hombre de 40 años en Pergamino y un bebé en Río Negro.

En diálogo con Info Región, el secretario de Salud de Avellaneda, Luis Parrilla, remarcó que “hubo casos de una gravedad poco habitual pero son aislados, por lo que no se trata de una epidemia”. Actualmente hay un “alerta epidemiológico”, que implica que el sistema sanitario nacional está “atento” a la aparición de casos con síntomas que coincidan con la enfermedad. Esto implica, por ejemplo, que se realicen testeos rápidos para garantizar celeridad a la hora del diagnóstico y el tratamiento.

“Hoy no hay brote epidemiológico”, insistió Parrilla, quien precisó que afecta en general a chicos de 3 a 15 años, pero puede aparecer en pequeños más chicos y adultos. “Es un germen que, diagnosticado a tiempo y tratado con antibióticos, no debería traer mayores problemas, pero el estreptococo Pyogenes tiene variedades y ahí viene la complejidad”, explicó.

¿Cómo ataca?

Parrilla precisó que “esa variedad (de estreptococo) produce una toxina que afecta a los organismos del cuerpo”. “El paciente, que tuvo un estado viral previo, tiene el sistema inmunológico vulnerable debido a la contienda con un cuadro viral y ahí es cuando un germen que anda dando vueltas por ahí es más agresivo”, planteó, al tiempo que aclaró que cuando el paciente comienza un tratamiento con antibióticos, “deja de contagiar” entre las 24 y 48 horas.

El Streptococcus pyogenes es una bacteria con 80 serotipos diferentes cuya distribución geográfica y por edades es variable. El instituto ANLIS-Malbrán está trabajando en la secuenciación completa del genoma de la bacteria para poder determinar si efectivamente se trata de una cepa más virulenta.

Las enfermedades más frecuentes son la angina y las infecciones de piel. También puede producir escarlatina, erisipela (infección de la piel), otitis media y fiebre puerperal. Aunque son poco frecuentes la bacteria puede generar infecciones graves, como neumonías, meningitis, infecciones del oído (mastoiditis), flemones de la garganta (periamigdalitis), bacteriemias (bacterias en sangre), osteomielitis (infección de huesos) y, en ocasiones raras, infecciones graves de la piel y otras complicaciones con elevada mortalidad.

La Secretaría de Gobierno de Salud de la Nación recomienda fortalecer la vigilancia y el tratamiento precoz de las infecciones invasivas bacterianas. Además aclara que este tipo de eventos pueden darse con mayor frecuencia en esta época del año y sugiere concurrir al centro de salud más cercano ante la aparición de cuadros respiratorios que presenten temperatura elevada, dolor de garganta, ganglios inflamados o bien infecciones en la piel.

Los síntomas frente a los cuales se debe acudir al médico son fiebre, dolor de garganta, vómitos, malestar en la garganta, rechazo de alimentos, dificultad respiratoria, anginas, faringitis y lesiones en la piel.

La forma de prevenir es el lavado de manos recurrente y no compartir elementos que se lleven a la boca, como bombillas y botellas. Desinfectar picaportes, puertas y canillas; limpiar y ventilar los ambientes del hogar a diario; tener el Calendario Nacional de Vacunación al día; dar sólo pecho a los bebés hasta los 6 meses y agregar a partir de esa edad los alimentos sólidos adecuados; toser o estornudar sobre el pliegue del codo o sobre un pañuelo descartable para evitar el contagio de otras personas; mantener reposo si hay síntomas; no asistir al trabajo o a la escuela mientras duran los síntomas.