Juicio por el crimen de Scriva: finalizó la etapa de declaraciones

Se llevó a cabo una nueva audiencia en la que declararon cuatro testigos. Este jueves serán los alegatos.

El juicio por el homicidio de Sebastián Scriva que se desarrolla en el Tribunal Oral en lo Criminal (TOC) 10 de Lomas de Zamora, culminó este miércoles con la instancia de declaraciones testimoniales luego de que declararon los últimos cuatro testigos. Este jueves serán los alegatos. 

Por el hecho están imputados David Nicolás Acosta y Héctor Ángel Pereyra, quienes en su declaración manifestaron que son inocentes. Ambos están imputados por “robo agravado por el empleo de arma de fuego en concurso real con homicidio criminis causa”.

La audiencia

Cuatro testigos se presentaron en la audiencia de este miércoles, de los cuales tres fueron amigos de los imputados que respaldaron las declaraciones de Acosta y Pereyra, quienes aseguraron que a la hora que ocurrió el crimen ellos se encontraban en lo de un amigo preparándose para irse a bailar. 

También declaró una joven que vendía entradas del boliche al cual asistieron los acusados el día que fue asesinado Scriva. La testigo afirmó que la noche del hecho les vendió el acceso vip a Pereyra, Acosta y sus amigos. “Ingresaron a las 2.30 o 2.40 y se fueron cuando cerró el boliche”, precisó. 

La próxima audiencia será este jueves desde las 9 en los Tribunales de Lomas de Zamora y se espera que se realice la etapa de alegatos. 

El hecho

El 11 de febrero de 2018, Sebastián Scriva (60) atendía su negocio, ubicado en la esquina de Madariaga y Portugal de Almirante Brown, y cuando se disponía a cerrar el local fue abordado por dos sujetos que le robaron la recaudación y lo balearon en el pecho. Fue trasladado al hospital de Monte Grande, pero falleció tras ser intervenido quirúrgicamente.

Horas más tarde, los sospechosos fueron detenidos cuando chocaron a bordo de una moto que tenía pedido de secuestro. Los encontraron alcoholizados y heridos en un hospital luego de que sufrieran un accidente, tras asistir a  un bar de Monte Grande llamado “Lukovo” donde habrían gastado parte de lo robado.