“Es una forma de mejorar su accesibilidad de derechos”, destacó Marcela Gacic, integrante del equipo de Servicio Social del hospital Esteves de Temperley. A pocos días de los comicios, ella y sus compañeras realizaron como todos los años electorales, el taller “Derecho al voto”, para que las pacientes sepan cómo manejarse el próximo domingo. ¿De qué se trató la capacitación?
Unas 70 mujeres se acercaron el jueves para presenciar la charla del equipo de Trabajo Social. “¿Quiénes votaron en las últimas elecciones?”, preguntó Marcela para abrir el debate. Hubo más de 20 manos levantadas, la mayoría emitió su voto en la misma condición en la que se encuentran ahora: internadas.
“Desde 2011 lo hacemos y a partir de la Ley de Salud Mental, comenzó a hacerse más sistemático. En cada elección trabajamos con las salas y con las pacientes que tienen ganas, como una forma de recuperar un derecho ciudadano con las mujeres que están en una situación de encierro”, contó la trabajadora social del Esteves.
Durante la jornada, se le explicó a las pacientes qué documentos están permitidos y cuáles derechos poseen a la hora de sufragar, como la prioridad en la fila y el voto asistido, para que puedan ingresar al cuarto oscuro con un acompañante de confianza o mismo con el presidente de mesa. Como cierre, realizaron un simulacro de votación.
“A veces y por vergüenza, no piden que el presidente las asista o avisan que la boleta que quieren poner no está, entonces buscamos fortalecerlas, para que vayan a votar como cualquier ciudadano”, explicó Marcela.
Sin embargo, no todas las internas pudieron asistir a la capacitación. Sólo seis chicas conforman el equipo de Servicio Social, que es dirigido por Fernanda Campos. Debido a la falta de personal, se hará un acompañamiento a las que residan en los distritos de Almirante Brown y Lomas de Zamora.
“Nosotras lo que hacemos es empujar el proyecto, darle el impulso y ponerlo a rodar en el hospital, pero recibimos otras manos”, admitió Gacic. En está ocasión, las trabajadoras contarán con el apoyo del área de Rehabilitación y también con el equipo de “Hospital de Día”, una modalidad ambulatoria con pacientes que asisten solamente seis horas, pero que también solicitaron acompañamiento.
Desde Servicio Social, estiman que este domingo serán 30 chicas las que irán con una acompañante; mientras que las 30 restantes asistirán con sus familias, con los permisos de salida.
“Los primeros años fueron un poco más masivas, porque había muchas mujeres que hace mucho no iban a votar y no sabían cómo hacerlo. Por suerte, ese número se fue achicando y las que hoy necesitan acompañamiento son muchas menos”, celebró Marcela, ante el avance de un proyecto que sueña con igualar las condiciones y los derechos políticos, de todas las pacientes con discapacidad.
