“Encerrar a nuestros mayores es inaceptable desde el punto de vista ético y moral”

Lo sostuvo la canciller alemana Angela Merkel. En Argentina, siguen las críticas a la medida anunciada por el gobierno de la Ciudad de Buenos Aires por la que los mayores de 70 años deberán solicitar un permiso especial para circular.

A nivel mundial, distintos países empezaron a analizar posibles alternativas para flexibilizar las cuarentenas implementadas por el coronavirus y que distintas actividades vuelvan a reactivarse. Una de las medidas que más polémica y rechazó genera es la de reforzar el aislamiento para los adultos mayores.

“Encerrar a nuestros mayores como estrategia de salida a la normalidad es inaceptable desde el punto de vista ético y moral”, subrayó la canciller alemana Angela Merkel, quien dejó en claro su postura.

En nuestro país, el gobierno porteño anunció este viernes que los adultos mayores de 70 años deberán solicitar un permiso especial para circular por la ciudad. La medida paradójicamente cuenta con el respaldo del Gobierno nacional.

“Mi primera reacción frente a esta medida fue casi un ataque de bronca. Los mayores sabemos de nuestra fragilidad, pero no es prohibiendo que van a lograr que nos cuidemos mejor. Nunca las prohibiciones o restricciones de este tipo son buena idea”, remarcó Graciela Fernández Meijide.

En declaraciones a un matutino porteño, la ex integrante de la Conadep sostuvo que “es una medida absurda e impracticable”.

“Anacrónico”

En la misma sintonía se expresó el defensor del Pueblo de la Tercera Edad, Eugenio Semino, quien calificó de “anacrónico” y “absurdo” el permiso que desde el lunes deberán gestionar los adultos mayores para poder circular excepcionalmente en la Ciudad de Buenos Aires y advirtió que esa población “no es débil mental” ni “tiene una minusvalía” para que se lo tutele con medidas de ese tenor.

En declaraciones formuladas a Radio La Red, Semino rechazó la nueva disposición del Gobierno porteño para los mayores de 70 años, quienes deberán solicitar un permiso especial a través de la línea telefónica 147 para poder circular, excepto en el caso de que se trate de una salida para comprar medicamentos, cobrar haberes o vacunarse.

“Desde el punto de vista gerontológico es anacrónico, es tratar de tutelar casi en forma absurda al adulto mayor. Desde el punto de vista del derecho, es absurda”, explicó el defensor de los mayores.

En ese sentido, Semino dijo considerar la medida como un error ya que “subestima el concepto de responsabilidad que tiene el adulto mayor” y recordó que “todas las violaciones que se han visto en la Ciudad por parte de adultos mayores fueron generadas “por los propios Estados”.

Para ejemplificar, el especialista recordó el día que “800 mil adultos mayores fueron movilizados para cobrar” sus haberes jubilatorios o la campaña de vacunación que hace viajar a muchos “de un lado para el otro”.