Suba de precios: comerciantes se defienden y apuntan a los proveedores

"Hace una semana que no tenemos huevos porque nos venden un cajón a 3 mil pesos", advirtió un almacenero de Lomas de Zamora.

Las quejas de los vecinos suba de precios en distintos comercios minoristas del barrio continúan, cumplido el mes del aislamiento, pero los comerciantes se defienden y apuntan contra los proveedores. Aseguran que ellos reciben los precios inflados y deben elegir entre abastecer el comercio y perder clientela. La situación de los comerciantes también es alarmante.

Oscar Emilio Arigazzi es dueño de un almacén ubicado en inmediaciones del Parque de Lomas y profundizó sobre el “padecimiento” del “comerciante minorista”. “Hace una semana que no tenemos huevos porque nos venden un cajón de 360 huevos a casi 3 mil pesos y por eso no compramos”, explicó a Info Región.

Advirtió, en este marco, que “la gente se enoja” con ellos porque creen que “se hacen los vivos” en medio de la emergencia. “Piensan que los comerciantes del barrio somos ladrones pero nosotros no formamos los precios”, aclaró.

Arigazzi precisó que ellos sólo reciben la mercadería y le ponen un “pequeño” porcentaje. Reiteró que el vendedor minorista “lo único que hace es recibir el precio con aumento o no”. En el caso de los huevos planteó que, por el costo al que los consigue, debería vender un maple a 270 pesos y la gente no lo compraría. Éste comerciante optó por no tener el producto y se enfrenta a la posibilidad de perder clientela, la poca que queda.

“Quedamos apremiados por los monopolios chinos, los supermercados de grandes cadenas, las empresas proveedoras, la presión de la AFIP y los municipios”, enumeró. También apuntó contra los “mayoristas”, que es donde suelen recurrir los comerciantes chicos, ya que “esos mayoristas intentan captar al consumidor final vendiendo al mismo precio que los comercios”. “En definitiva nos sacan los clientes a los comerciantes”, agregó.

Además, remarcó que los supermercados grandes acceden a “más beneficios” por comprar en “más volumen”, y que los comercios quedan “fuera” de “cualquier” promoción o descuento que pueda haber. Por lo que Arigazzi señaló que es muy difícil subsistir en esta cuarentena. Todo esto sumado a que deben pagar los servicios, el alquiler, y también la situación de que va “menos” gente al negocio. Entonces subsisten como pueden, y en el caso de su almacén, realizan entregas a domicilio para paliar un poco la crisis, aunque esto sea “riesgoso”.

Todos los comercios deben aceptar el pago con tarjeta de débito. Este comerciante se quejó porque la cuenta del banco o Mercado Pago tiene un “costo de mantenimiento”. “Al no tener los bancos abiertos, todos los días tenemos que ir al cajero a retirar parte del dinero para hacernos de efectivo y así seguir comprando mercadería y eso también es un costo”, consideró, y aludió al pago de las extracciones, a razón de 60 ó 70 pesos por operación. Sin embargo, por disposición del Banco Central de la República Argentina, se suspendió hasta el 30 de junio el cobro de cargos y comisiones por las operaciones realizadas en cajeros automáticos (incluyendo las extracciones y consultas de saldo), cualquiera sea la entidad o red utilizada para hacer la operación.

“Está muy complicado para seguir, te sentís apretado por todos lados”, concluyó.