Limitan el ATP, la ayuda será para los sectores críticos

El gabinete económico definió la implementación de la séptima etapa del programa de asistencia por la pandemia. ¿Qué pasa con el IFE?

El gabinete económico definió este miércoles la modalidad de implementación de la séptima etapa del programa de la Asistencia de Emergencia a la Producción y el Trabajo para los sectores “críticos” de la economía nacional, castigados por la pandemia por coronavirus.

La Asistencia al Trabajo y la Producción (ATP), en su séptima versión, alcanzará, con el pago del salario complementario, a los sectores del turismo, la cultura, el entretenimiento y la gastronomía, mientras que el resto de los sectores “no críticos” podrá ser beneficiario de créditos subsidiados.

Tras el encuentro, Todesca Bocco dijo que la “recuperación económica” tiene “dos velocidades, una que es para los sectores no críticos donde ya se ven niveles de recuperación en algunos casos anteriores al impacto de la pandemia, y en otros muy cerquita”. “Pero después tenemos un conjunto de sectores que todavía no se han podido recuperar y eso tiene que ver con las medidas sanitarias. Son los que denominamos como ‘sectores críticos’ en los que vamos a concentrar el esfuerzo fiscal”, añadió la funcionaria.

La reunión, encabezada por Cafiero, se realizó en el Salón de los Científicos de la Casa de Gobierno. Participaron los ministros de Economía, Martín Guzmán; de Desarrollo Social, Daniel Arroyo y de Trabajo, Claudio Moroni, presidente del Banco Central, Miguel Pesce; la directora de la AFIP, Mercedes Marcó del Pont; la vicejefa de Gabinete, Cecilia Todesca Bocco y el secretario de Política Económica, Haroldo Montagú.

En ese marco, explicó que los sectores ‘no críticos’ que podrán acceder a los “préstamos con garantía estatal y subsidio de tasa” son aquellos que reflejen una “facturación nominal” entre cero y el 35 por ciento. “Bajamos de 40 a 35 por ciento (el tope de facturación nominal) porque, en el DNU original, dice que nosotros podemos asistir a las empresas siempre y cuando tengan una caída sustancial en su facturación real y la inflación interanual está en 36 por ciento. Es por eso que estamos corriendo ese límite”, resumió la funcionaria.

El ATP se puso en marcha en marzo tras la declaración de Aislamiento Social Preventivo y Obligatorio (ASPO) por la pandemia del coronavirus, y durante estos meses fue incorporando beneficios tanto para empleadores como a trabajadores.

¿Qué pasa con el IFE?

Sobre el futuro del Ingreso Familiar de Emergencia (IFE), la funcionaria sostuvo que la continuidad de la ayuda sigue siendo tema de “discusión” dentro del equipo económico, aunque señaló que lo que observan es que hay “un nivel de recuperación” sostenido en la “circulación de las personas” y que, por esa razón, todavía deben evaluar “cuál es la mejor manera de invertir esos recursos”.

“El IFE fue diseñado para el momento, abril, mayo, junio, donde la gente directamente no podía salir de su casa. Ahora estamos en otro contexto, los trabajos se han recuperado, también los trabajos de la informalidad. Entonces nosotros necesitamos poner los recursos allí donde verdaderamente se requieren”, planteó.