Detuvieron a un comisario acusado de estar involucrado en el crimen del descuartizado de Lomas de Zamora


Un comisario fue detenido este jueves, acusado de estar involucrado en el crimen de Fernando Pérez Algaba, el vendedor de autos de alta gama que fue asesinado y descuartizado en Ingeniero Budge.

Se trata de Mariano Horacio Córdoba (48), oficial de la Policía de la Ciudad de Buenos Aires. El fiscal Marcelo Domínguez, titular de la UFI 5 del Departamento Judicial de Lomas de Zamora, ordenó la detención después de tomarle declaración indagatoria. El arresto se llevó a cabo en horas del mediodía, por efectivos de la DDI.

El martes, el hombre de 48 años fue pasado a disponibilidad en la fuerza. Tras esta decisión, Domínguez pidió investigar por su presunta participación en el crimen Pérez Algaba. También había pedido su arresto, aunque en ese momento no fue concedida por el juez de Garantías 4, Sebastián Monelos, al considerar que faltan pruebas para encarcelarlo.

Ahora, con más elementos en su contra, fue imputado y formalmente procesado por el delito de “homicidio triplemente agravado por su comisión con alevosía y por el concurso premeditado de dos o más personas, ello mediante el uso de arma de fuego, en concurso real con falso testimonio”.

De acuerdo al pedido de detención, el comisario, quien se desempeñaba en el área de comunicaciones de la Policía de la Ciudad, tenía vínculos comerciales con el principal acusado y ahora detenido, Maximiliano Pilepich.

El Ministerio Público cree que Córdoba le pasó a Pilepich un número de teléfono con el que el acusado tuvo muchas llamadas entre el 18 y 19 de julio pasado, días en los que se cree que Pérez Algaba fue asesinado.

El fiscal considera que el comisario, además de habilitarle la línea telefónica, instruyó al exsocio de la víctima en cómo emplear y manejar la cuestión tecnológica para evitar ser vinculado al hecho.

Maximiliano Pilepich y Nahuel Vargas son los principales sospechosos en el crimen del comerciante. Pilepich ya fue detenido, mientras que Vargas sigue prófugo.

Ambos eran exsocios y examigos de Fernando Pérez Algaba y se dedicaban a la construcción. Según lo que se pudo reconstruir, los sospechosos tenían una deuda cercana a los US$150 mil.

Las declaraciones recabadas por la Justicia indican que esa deuda los tenía enfrentados con el comerciante y por eso él había llegado a la Argentina.

De acuerdo a lo trascendido en la investigación, Pilepich y Vargas le habían dado una camioneta Land Rover a la víctima y el 18 de julio se encontraron en una escribanía de Hurlingham para pagar US$90.000.

Los otros US$60.000 se iban a entregar en medio del campo donde el empresario fue visto por última vez. Los sospechosos llegaron en un Mercedes Benz a ese lugar, mientras que Pérez Algaba se presentó solo en la camioneta Land Rover y presuntamente iba a esperar que alguien lo buscara.

Más implicados en la causa del crimen de Pérez Algaba

El lunes pasado, fueron detenidos Matías Ezequiel Gil, Luis Alberto Contreras, Fernando Gastón Martín Carrizo y Flavia Bomrad.

El juez también ordenó 18 allanamientos. Ya se llevaron a cabo inspecciones en Moreno, Hurlingham, Lomas de Zamora, en Pilar, en Capital Federal, en Morón, en San Miguel, Tres de Febrero e Ituzaingó.

Además, allanaron un departamento donde se sospecha que descuartizaron a Pérez Algaba. Se trata de un edificio de cuatro pisos y planta baja que aún está en construcción, ubicado en la calle Londres al 1665, en el partido de Hurlingham.