El asesinato de Daniel Barrientos en La Matanza derivó en un paro de colectivos impulsado por sus propios compañeros, pero afectaba a la Zona Oeste; sin embargo, los incidentes registrados este mediodía provocaron que más líneas se sumen a la medida de fuerza.
Trabajadores de la línea 60 y de la empresa DOTA confirmaron el cese de actividades. En la zona sur del Conurbano, varias líneas anunciaron que no funcionarán.
“Debido a las noticias de público conocimiento hay inconvenientes en el servicio“, precisa la firma YITOS S.A. Usuarios anunciaron que los choferes de los colectivos en los que viajaban les advirtieron que esa era la última unidad en la calle. Tal es el caso de las líneas 548, 543, 542 y 552, entre otras.
La UTA confirmó esta madrugada la medida de fuerza en a Zona Oeste y se espera su participación en una reunión con autoridades, pero hasta el momento no llamó al paro.
El ministro de Seguridad, Sergio Berni, fue golpeado por choferes que reclamaban seguridad y tuvo que ser atendido en el hospital Churruca.
EL ORIGEN DE LA PROTESTA
Un chofer de colectivo fue asesinado esta madrugada de un disparo en el pecho durante un asalto a bordo de la unidad cometido por al menos dos delincuentes que se tirotearon con un efectivo de la Policía de la Ciudad que iba a bordo, en la localidad de Virrey del Pino, partido de La Matanza, informaron fuentes judiciales y policiales.
A raíz del hecho, los colectiveros de la empresa Nuevo Ideal S.A., que tiene entre sus líneas a las 620, para la que trabajaba la víctima, iniciaron un paro de servicio en reclamo de seguridad.
El hecho ocurrió cerca de las 4.30 en el cruce de las calles Bernardino Escribano y Cullen, del barrio Vernazza, cuando al menos dos delincuentes armados subieron al colectivo conducido por Daniel Barrientos, un chofer de 65 años que estaba a punto de jubilarse, según detallaron las fuentes de la pesquisa y sus compañeros.
