Caos de tránsito en el centro de Lomas de Zamora, hay más de 10 cortes y reducciones de calzada


Transitar en auto, y en ocasiones también a pie, por el centro de Lomas de Zamora se convirtió en un caos. Desde que hace seis meses comenzaron las obras de expansión de la red de cloacas, que se sumaron a la construcción de dos pasos bajo nivel la circulación por la ciudad se volvió imposible. Para peor, en las últimas semanas se agregaron otras obras públicas y privadas que terminaron de complicar el panorama.

Según un relevamiento de InfoRegión hay al menos diez interrupciones de tránsito en la zona y unas 40 cuadras sufren interrupción total o parcial de la circulación de autos, en el último caso con angostamiento de la calzada.

Basta dar una vuelta por la ciudad para tomarse con vayas de madera blancas y rojas por todos lados. No siempre bien señalizados cortes y las posibles vías de escape, recorridos que deberían tomar unos pocos minutos pueden atrapar al conductor por períodos de tiempo incalculables de antemano.

Las trabas comenzaron con las obras para mejorar la comunicación entre la zona este y oeste del distrito mediante la construcción de dos pasos bajo las vías del ferrocarril Roca, uno a la altura de las calles Loria y Ayacucho, en Lomas, y el otro para unir Vieytes con Rincón en Banfield. La paradoja es que, mientras tanto, hace meses que pasar de un lado al otro de la ciudad se volvió una misión imposible. Los cierres de los antiguos pasos a nivel y la interrupción del tránsito complica también al tránsito en los cruces más próximos y alarma a los comerciantes, que ven con desesperación como la pandemia primero y las lentas obras públicas después hacen caer su facturación más abajo que los propios pasos que se construyen.

Además, una mega obra de ampliación de una red troncal de desagüe cloacal que se hizo visible en las inmediaciones de la plaza Grigera pero que tiene ramificaciones por todo el centro, agregó escollos a la vida cotidiana. Se trata de un proyecto denominado Colector Cloacal Aliviador Lomas y está destinado a redimensionar la red de saneamiento de la zona céntrica de la ciudad y 8 kilómetros de recorrido. Encima, el municipio aprovechó para comenzar las obras de semipeatonalización de Manuel Castro, lo que alarga el tiempo de resolución del problema.

Pero no es sólo el tránsito en el centro, que también está estorbado por pequeñas obras públicas o privadas, como la de la calle Italia entre Gorriti y Loria, donde la rotura de veredas y parte de la calzada se suma a la construcción de un edificio de gran envergadura que ocupa la vía pública como si fuera privada. También la salida del tránsito desde el centro hacia Camino Negro está complicada.

Ocurre que el troncal de cloacas también provocó el corte de tránsito en la calle Rivera al 1200, en Pereyra Lucena al 1500 y al 2000 y en Baliña entre Pereyra Lucena y Portela, entre otros puntos que se dibujan día a día como si una serpiente avanzara por el damero de la ciudad. También está cortada todavía la calle Sarmiento, continuación de Manuel Castro, entre Laprida y Loria. En parte está reducido el tránsito en Loria y en Gorriti, y por si no alcanzara, también una obra de mantenimiento y mejora de la red de gas avanza desde Banfield hasta Lomas, rompiendo veredas y en parte la calzada, con el consiguiente entorpecimiento del tránsito.

Esas tareas se ven desde Vieytes hasta Rivera, tanto por Manuel Castro como por Azara, y en algunas zonas se expande hacia el oeste, también con un final incierto.

Poca información, muchas vayas, escasa señalización, una temperatura en aumento y la tensión propia de fin de año, época de corridas y emociones intensas si las hay, prometen dejar a los lomenses, este año, al borde del ataque de nervios.