Un motín, con intento de toma de rehenes incluído, tuvo lugar en el instituto de menores de Larroque y 12 de Octubre en Banfield, partido de Lomas de Zamora, cuando un grupo de internos se habría rebelado luego de que el personal de la institución evitó la entrada de sustancias prohibidas desde el exterior.
Según el relato de testigos, los internos reaccionaron e intentaron apresar a uno de los operadores que pudo ser rescatado por uno de sus compañeros, aunque terminaron con contusiones y heridas leves.
Siguiendo el ritual de los motines, los jóvenes cubrieron con los colchones las rejas y entre ajustes de cuentas y amenazas exhibieron elementos corto-punzantes de fabricación tumbera y, durante unas horas, tuvieron, al menos en apariencia, el control del pabellón 1.
Estos sucesos que trascendieron en las últimas horas, se desarrollaron el lunes después del mediodía y recién a las 21 se presentó en el lugar la directora del Organismo Provincial de la Niñez y Adolescencia (OPNyA), Laura Sporetti.
En tanto ya estaban en el foco del conflicto dos juezas, el fiscal de turno y personal del Comité contra la Tortura (CPM).
Entre ellos estuvo la jueza de Responsabilidad Penal Juvenil 2, Marta Pascual, quien intentó negociar con los amotinados con quienes, finalmente, se firmó un acta compromiso para que depongan su actitud.
Entre los reclamos figuran mejoras en la condiciones de internación, tener más tiempo fuera de las celdas, recibir visitas íntimas y usar celulares.