Temperley: Falleció un anciano en un geriátrico e investigan si fue por Covid-19

Familiares del hombre fallecido denunciaron que no fueron avisados de los casos de coronavirus que hubo en la residencia.

El Geriátrico San Benito de Palermo, ubicado en Benito 865 entre las calles General Paz y Lavalle, Temperley, se encontraba en aislamiento luego de que dos empleados dieran Covid-19 positivo y la restricción finalizaba el viernes 10. Sin embargo, recién ese día Sebastián, hijo de un hombre residente en el lugar, se enteró gracias a la Secretaría de Salud que habían existido casos de coronavirus dado que “la institución ocultó esa información”. Su padre falleció a las pocas horas y está a la espera del resultado del hisopado.

“Tenía 39 de fiebre, con mucha taquicardia y cuando lo bajan por la escalera para trasladarlo, mi papá tiene un paro cardíaco y fallece en el hall del lugar. Si hubiera sabido de los casos, que era un posible covid, podríamos haber accionado para el traslado y estar hablando de otro desenlace”, advirtió Sebastián en diálogo con Info Región.

Y amplió: “Cuando fallece mi viejo en el hall, el médico solicita el oxígeno y desde el geriátrico no tenían un tubo cuando por reglamentación deberían tenerlo. No había personal médico ya que la médica había ido una o dos horas a la mañana, vio el cuadro de mi padre, informó a PAMI para el traslado y se fue”.

“Están abandonados”

En este marco, mostró su preocupación sobre el actual panorama en San Benito y sobre la salud de los otros 35 pacientes. “Me da pena la gente que sigue adentro y que no se sabe si le informaron a los parientes, si están con Covid o no o qué pasa. Están abandonados”.

Explicó luego que el aislamiento finalizaba el viernes 10 de julio y el jueves recibió una llamada de la residencia porque su padre tenía fiebre. “Concurro al lugar, el dueño me hace ingresar, con lo cual ya se dio el primer error porque no debería haberme dejado entrar al estar intervenido por la Secretaría de Salud”, recalcó.

Sebastián contó que entró, le tomó la temperatura a su padre y tenía 38,5 por lo que llamaron a una médica del PAMI, quien lo vio y les comentó que podría ser una “infección urinaria” y una “bronquitis” por lo que le recetó unos remedios.

“Al yo no saber que hubo casos y que la médica que vino me dijo que podía ser una infección urinaria y que por eso era la fiebre, uno se queda tranquilo que se quede ahí controlado”, indicó y prosiguió: “El viernes me llaman otra vez porque estaba con 39 grados, cuando llego al lugar entro y ya estaba el medico ahí. Estaba enojado porque por el sistema no le habían avisado, ni a nosotros, que habían existido casos de Covid, así que ingresó sin las protecciones correspondientes”.

En este punto, Sebastián diferenció el trato que recibieron por parte del secretario de Salud municipal, Mariano Ortega Soler. “Por los únicos que nos sentimos acompañados fue por la Secretaría. Por WhatsApp todo el fin de semana en contacto, en todo momento a nuestra disposición. Soy un descreído de la política y en este caso accionaron como corresponde”, resaltó.

Por el hecho, la UFI 3 de Lomas de Zamora inició una causa por “averiguación de causales de muerte”. “Recibimos un llamado al 911 donde familiares de uno de los pacientes del geriátrico estaban muy ofuscados con el personal del mismo porque el padre había fallecido en el lugar y no le habían informado de los casos de Covid”, precisaron fuentes policiales a este medio.

“Me mintió en la cara”

En este punto, Sebastián insistió en que uno de los dueños del lugar le “mintió en la cara” cuando le preguntó sobre si había habido algún caso sospechoso de coronavirus.

“Un día antes del fallecimiento me dijo que por suerte no habían tenido ningún caso. Cuando mi viejo se muere, lo llamo y le digo que vaya porque no había nadie, que estaba la policía, que no nos avisó nada del Covid, que mi papá falleció a lo que me dice que no iba a venir nada”, afirmó y aseveró que luego recibió audios en los que lo insultaba.

“Muy desubicado como autoridad de un lugar en donde acaba de fallecer una persona hablar con el familiar directo, insultándolo y diciéndole todas esas cosas. Hasta Ortega Soler y todo su equipo estaban totalmente indignados, porque obviamente se los pasé a ellos, de cómo un profesional de la salud podía manejarse de esa manera en esa situación”, criticó.

Sebastián, por último, hizo hincapié en que “el problema es la gente que sigue ahí internada” porque su padre “ya falleció y no se puede hacer más nada”.

Info Región se puso en contacto con el geriátrico en dos oportunidades pero en ambas llamadas una trabajadora aseguró “no saber nada” y que desconocía el horario en el que las autoridades llegarían a la residencia. Mientras que desde el Municipio de Lomas aseguraron que se está acompañando a la familia en este duro momento.