Horas de angustia, incertidumbre, falta de protocolos, precariedades y errores casi infantiles como difundir un video equivocado se vivieron hoy cuando una recién nacida fue secuestrada del Hospital Alende en la localidad lomense de Ingeniero Budge por una mujer que se hizo pasar por enfermera.
Tras siete horas de búsqueda fue un llamado al 911 dio la pista definitiva para localizar y rescatar a la bebé y detener a Erika Castaño, de 27 años, la principal sospechosa y que vive en San Clemente del Tuyú a la que identifican como la misma mujer que se hizo pasar por médica para llevarse a la niña.
La investigación de la desaparición estaba a cargo de la fiscal Silvina Estévez, titular de la UFI 4 de Lomas de Zamora.
La recién nacida fue hallada en la terminal de colectivos de Llavallol por la Policía Bonaerense, cuando la secuestradora intentaba viajar con ella otros documentos que el certificado de nacimiento que le había sacado a la madre biológica antes de llevarla fuera del Hospital.
Horas más tarde, Nicole, la madre, le confirmó a la policía que la mujer que arrestaron era la supuesta médica que se había llevado a su hija con la excusa de realizarle estudios.
Al respecto, no se descarta la hipótesis de que haya gente del hospital involucrada en el caso y que pudo tratarse de un operativo de trata de personas.
El reencuentro con la familia
Apenas la encontraron se comunicaron con la familia y por la tarde ya había sido devuelta a sus padres y le estaban haciendo estudios de rutina.
Por su parte, la abuela paterna consideró que hubo “complicidad” por parte del hospital lomense ante la falta de controles, y precisó la madre de la beba sigue internada, con apoyo psicológico.
“Todavía no la conozco pero ahora voy a poder abrazarla. Queremos justicia, esto fue una entrega“, dijo.
En tanto uno de los tío de la beba dio más detalles: “La foto de la beba se difundió en redes sociales y una empleada de una estación de servicio la reconoció. Decía que la mujer con la que estaba aparentemente no era la mamá porque estaba muy nerviosa. Le había comprado una leche materna y estaba esperando un micro para irse afuera”.
“Ella parecía tener treinta y pico de edad. Dijo que su hija había nacido el 30 de noviembre. A la nena la revisan y tenía el cordón umbilical todavía puesto, cosa que no coincidían las fechas. Le preguntaron si le estaba dando de amamantar a la beba y ella dijo que no, porque no le salía leche. Le pidieron que lo comprobara con la Policía femenina y no pudo hacerlo”, relató una testigo.
Esa declaración coincide con la de una comerciante que precisó que la sospechosa quiso adelantar su pasaje de micro para salir esta misma noche y, en el momento que la empleada le pedía la documentación correspondiente, llegó la policía al lugar. Además, la mujer no iba con un bolso de viaje, sino con bolsitas.
“Procesadas mas tomas fílmicas, se certifica que la mujer, identificada como ERICA SILVANA CASTAÑO de 27 años, había sido la que había cometido el hecho, habiéndose cambiando el sweter, el cual fue secuestrado por personal policial, en inmediaciones del nosocomio”, indica un parte de inconfundible sintaxis policial que da la razón a Luisa, una de las abuelas de la beba robada..
La niña ya fue reconocida por su madre, que la está alimentando, aunque le realizarán un peritaje de ADN para reconfirmarlo.