Desde hace 11 años lucha contra la violencia institucional y venció al Covid-19

“Por el Covid-19 tuve que abandonar mi lucha, pero la voy a retomar”, advirtió Alicia Ramírez. Estuvo internada en terapia intensiva y recibió plasma.

Alicia Ramirez tiene 61 años y venció al Covid-19. La mujer lucha contra la violencia institucional desde hace 11 años, cuando un ex militar le arrebató la vida de su hijo. Luego de haber superado la enfermedad, lamentó que tuvo que “abandonar” su lucha judicial pero dejó en claro que la retomará.

Alicia estuvo un mes internada en el hospital municipal “Doctor Norberto Piacentini” de Llavallol, luego de ser diagnosticada con Covid-19, pero su condición se vio agravada por una neumonía. Según relató la mujer, estuvo cinco días con oxígeno porque sufría de falta de aire y al séptimo día fue trasladada a terapia intensiva. “Estuve en terapia por 15 días y entubada hasta que me pasaron plasma, y eso es algo que quiero agradecerles a todos los que me ayudaron con el pedido del plasma, porque sino hoy yo no estaría viva”, valoró Alicia. 

En diálogo con Info Región, la mujer de 61 años celebró haber sido dada de alta el pasado 16 de septiembre, aunque lamentó que como consecuencia de haber padecido coronavirus su lucha contra la violencia institucional se vio truncada. “Todavía tengo dolores en las caderas, no me he podido parar y he tenido que abandonar mi lucha de justicia, pero la voy a retomar”, dejó en claro.

“Hoy en día me encuentro mucho mejor pero aún no tengo fuerza en las piernas y no logró caminar. Lo que quiero decirle a todo el mundo es que se cuide y que no salga, porque es una enfermedad muy dolorosa”, advirtió la mujer, convocando a la comunidad a tener los recaudos necesarios para evitar la propagación. 

Su lucha

Martín Aranda, el hijo de Alicia, tenía 19 años cuando el 31 de enero de 2009, en la calle Sixto Fernández al 2300 en Lomas de Zamora, charlaba con una docena de personas a las cuales estaba invitando a festejar su cumpleaños. En el lugar aparecieron en dos hombres en moto y el que iba de acompañante efectuó una ráfaga de entre 13 y 15 disparos hacia el grupo.

Aranda fue baleado en el brazo y en la espalda, murió antes de poder recibir asistencia médica. Por el caso fue condenado a 22 años de prisión un ex militar y su presunto cómplice fue absuelto por falta de pruebas. La madre de Martín aún lucha por la sentencia que falta, pero además todos los días teme que al detenido “le brinden el beneficio de la prisión domiciliaria por su discapacidad”.

A partir del trágico hecho, Alicia fundó la Asociación Civil Martín Aranda, la cual, desde hace 11 años, acompaña a las familias de víctimas de la Violencia Institucional y lucha por que se haga Justicia.