Massa defendió el canje de deuda de organismos públicos

"Es absolutamente beneficioso" para Anses, aseguró.

Sergio Massa - Frente Renovador

El ministro de Economía, Sergio Massa, afirmó hoy que el canje de deuda de organismos públicos será “absolutamente beneficioso” para la Administración Nacional de la Seguridad Social (Anses) que “ganará un poco más de US$ 2.000 millones” con la operación, monto que será utilizado para un programa de créditos a lanzarse la semana próxima.

Massa anunció, no obstante, que solicitó a la Universidad de Buenos Aires (UBA) un dictamen sobre la participación del organismo de seguridad social en el esquema de canje dispuesto esta semana, y aseguró que “si diera que no es beneficioso, Anses no intervendrá” en la medida.

“El canje es un ordenamiento del manejo de la deuda pública dentro del Estado. Teníamos 113 organismos del Estado público nacional que, de manera desordenada y descoordinada, muchas veces generaron incluso prejuicios al propio Estado al administrar en el mercado secundario la compra y la venta de títulos públicos”, explicó Massa en diálogo con Radio Mitre

El ministro señaló que esta situación “es un problema para una economía que necesita orden en sus cuentas públicas” y que le quitaba “capacidad de acción y de estabilización al Estado”, por lo cual la medida permitirá “garantizar certidumbre” y ganar “transparencia”. “A partir de la medida los organismos no podrán comprar y vender bonos a discreción en el mercado secundario”, detalló.

Del mismo modo, el canje apuntará a reducir la presión sobre los dólares financieros, cuyas subas en enero -indicó Massa- tuvieron un correlato en la inflación, algo que considera clave para dar “garantía y certezas” en una economía “culturalmente bimonetaria”.

En ese marco, indicó que se trata de una decisión que ya estaba contemplada desde el inicio de su gestión, al igual que en el programa con el Fondo Monetario Internacional (FMI). “En agosto cuando empezamos esta tarea con el equipo económico planteamos el tema del ordenamiento de la deuda intraestado y en el documento de prospectiva del año 2023 del FMI, donde se elogió el sobrecumplimiento de las metas del programa, también está planteado el tema”, recordó el titular del Palacio de Hacienda.

De todos modos, aclaró que “quién toma las decisiones de política económica es el gobierno argentino”, y que bajo el “compromiso de principios y metas” que posee el país, “el Fondo puede estar de acuerdo con algunas medidas y con otras no”.

Por otro lado, el titular del Palacio de Hacienda respondió los cuestionamientos a la oposición respecto del presunto prejuicio que le generaría la medida a la Anses. “La Anses gana un poco más de US$ 2,000 millones con esta operación porque lo que hace es mantener la dolarización de cartera y, por otro lado, le da la posibilidad en el bono al momento de venderlo de elegir entre liquidarlo por inflación o en dólares”, precisó Massa.

Tras lo cual, apuntó que en lugar de presentar una pérdida, implicará una ganancia de “más de $ 400.000 millones” en el Fondo de Garantía y Sustentabilidad (FGyS) “que serán asignados a créditos a jubilados y créditos productivos”, lo cual será anunciado por la entidad previsional “la próxima semana”.

De todos modos, el ministro le ordenó a la Facultad de Ciencias Económicas (FCE) de la UBA “un dictamen para aquellos que todavía tengan dudas respecto a si es beneficioso o perjudicial para la Anses”. “SI el dictamen diera que no es beneficioso, Anses no intervendrá en el canje, pero tenemos la certeza que es absolutamente beneficioso”, enfatizó Massa.

El funcionario consideró que las críticas partieron de “opiniones anticipadas” que habían sido vertidas antes de publicarse el decreto y su anexo, y recordó que el FGS tuvo “un crecimiento en el valor patrimonial de casi el “40% en los últimos tres años”.

Por su parte, tras destacar el crecimiento interanual y mensual que registró en febrero la economía -de 0,7% y 0,3%, respectivamente- y un nivel de desempleo que se encuentra “en los niveles más bajos de los últimos 20 años”, Massa reconoció que la inflación continúa representando “el principal problema de la economía argentina”.

Además de la sequia que afecta el valor de algunos alimentos, responsabilizó la suba de precios a “la dificultad que tuvo la Argentina en acceder al mercado de capitales en 2020 y 2021”, lo cual la obligó a financiar “su enorme déficit” con emisión. “Fue una enorme bola de pesos que no tenía correlato en la economía real porque además recordemos que la economía cayó 10 puntos”, señaló el ministro.

En ese sentido, desestimó los señalamientos de una presunta corrida bancaria porque precisamente “no faltan pesos para que la gente pueda retirarlos sino que sobran”. “La verdadera bomba que tuvo la economía argentina fue que por una sequia que fue la mitad de la que está enfrentando este Gobierno, se decidiera salir corriendo al fondo, lo que nos quitó financiamiento externo, el acceso al mercado de capitales y reperfilar, como nombre coqueto del default, a la deuda en pesos”, añadió.

Por último, Massa buscó brindar tranquilidad sobre el nivel de reservas y el tema cambiario. Indicó que se reducirán las obligaciones externas en US$ 3.800 millones en ahorro de importaciones de gas a partir de haber realizado una compra anticipada para el año de GNL aprovechando “los precios bajos en los mercados internacionales”, y a través de la inauguración del gasoducto Néstor Kirchner a fines de junio pròximo.

Del mismo modo, calculó que, en concepto de desembolsos de organismos multilaterales, habrán “US$ 1.700 millones a US$ 2.400 millones” más de los previstos en las arcas.

Pero además de ahorro y desembolsos, el ministro consideró como clave tener un resultado positivo en la balanza comercial para “hacer fuerte a la moneda”. En ese sentido, adelantó que “entre abril y agosto” se espera un récord de exportaciones tanto en la industria automotriz como en la minera, y que, respecto a la energía, “en mayo va a estar listo el oleoducto para exportar curdo a Chile y se trabajará para exportar gas en septiembre a Brasil por el gasoducto Paraná-Uruguayana”.